Mas hace equilibrios ante la invitación de ERC, PP y PSC a elegir pareja

  • El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha hecho hoy equilibrios para evitar decantarse por alguno de los grupos de la oposición como socio preferente, pese a las invitaciones que le han lanzado ERC, PP y, en menor medida, PSC.

Barcelona, 30 nov.- El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha hecho hoy equilibrios para evitar decantarse por alguno de los grupos de la oposición como socio preferente, pese a las invitaciones que le han lanzado ERC, PP y, en menor medida, PSC.

En la primera sesión de control al presidente de la Generalitat tras las elecciones generales del 20 de noviembre, Mas ha visto cómo ERC y PP se disputaban su condición de principal pareja de baile del Govern, mientras el PSC se ofrecía a hablar de los presupuestos.

Consciente del riesgo de entregarle la llave de la gobernabilidad exclusivamente a un PP con un poder casi absoluto en el conjunto del Estado, Mas ha evitado cerrarse puertas y ha procurado cultivar la fórmula de la geometría variable en su política de alianzas.

La primera en plantearle la disyuntiva a Mas ha sido la portavoz parlamentaria de ERC, Anna Simó, que ha advertido de que el Govern se encuentra en una "encrucijada" en la que tiene que elegir entre un PP "radicalmente contrario a la transición nacional" que propone CiU y una ERC dispuesta a "hacer piña" en favor del pacto fiscal.

Mas le ha garantizado que Govern y ERC irán "juntos a defender el pacto fiscal" ante el Gobierno español, sin "aplazar" este tema para más adelante, si bien ha pedido paciencia y ha advertido de que no puede esperarse que lo que no se ha logrado "en 30 años" se obtenga ahora "en 24 horas" con un PP con mayoría absoluta en las Cortes.

A continuación ha sido el turno de la presidenta del PP catalán, Alícia Sánchez-Camacho, que ha cargado contra el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero por retener el pago a Cataluña de los 750 millones de euros que reclama la Generalitat.

Sánchez-Camacho ha sido muy explícita a la hora de pedirle a Mas que deshoje la margarita y elija entre el apoyo estable de un PP que está dispuesto a respaldar sus medidas anticrisis o una ERC que presiona para celebrar una consulta sobre el pacto fiscal.

"Usted debe escoger compañeros. Y no todos los compañeros son los mismos. Nuestro grupo le garantiza estabilidad y progreso, algunos le garantizan ir hacia atrás. Con amenazas de referendos no se genera la estabilidad que necesita el país", ha planteado.

Tampoco en esta ocasión ha aprovechado Mas para descartar a algún posible socio; simplemente ha emplazado al PP a no desperdiciar la "magnífica oportunidad" de que dispondrá desde el Gobierno español para "empezar a tomar decisiones que favorezcan a Cataluña", en alusión al pacto fiscal y a los pagos pendientes a la Generalitat.

Por su parte, el presidente del grupo parlamentario del PSC, Joaquim Nadal, ha dirigido un discurso muy crítico con los ajustes anunciados por Mas: "Sólo con recortes no se sale de la crisis".

Sin embargo, ha acabado tendiendo la mano al Govern para hablar de los presupuestos de la Generalitat de 2012, siempre que no se traspasen "dos líneas rojas: cohesión social y reactivación económica".

Mas ha admitido que en 2012 no se podrá seguir "recortando" gasto público como se ha hecho este año, por lo que ha justificado que se plantee pedir "sacrificios" a los funcionarios y un aumento de las tasas para incrementar los ingresos del Govern.

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