Micheletti suspende el toque de queda para que la población compre comida

Un muerto en choques entre seguidores de Zelaya y la policía

El presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, ha anunciado este miércoles la suspensión por al menos seis horas del toque de queda vigente desde el pasado lunes, para que la población pueda comprar alimentos. En una entrevista con el canal 10 de la televisión local, Micheletti ha dicho que el toque de queda impuesto a causa del regreso al país del depuesto mandatario, Manuel Zelaya, se suspenderá hoy entre las 10.00 y las 16.00 horas (16.00 y 22.00 GMT) para permitir que la población se abastezca de alimentos, agua y otros productos.

Zelaya se encuentra desde el lunes en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, tras regresar inesperadamente al país 86 días después del golpe de Estado. Las fuerzas de seguridad desalojaron ayer a los simpatizantes de Zelaya que se manifestaban frente a la embajada, después de lo cual se produjeron disturbios entre las dos partes en algunos barrios y colonias de la capital hondureña.

Según el líder del Frente de Resistencia contra el Golpe de Estado en Honduras, Rafael Alegría, más de 400 hondureños partidarios del presidente derrocado han sido detenidos en las últimas 48 horas en el país y han sidotrasladados a un campamento deportivo de la capital, Tegucigalpa.

Por su parte, Zelaya ha denunciado este miércoles que el Gobierno hondureño de facto planeó el martes asaltar la embajada de Brasil, donde se encuentra refugiado, y declarar que se había suicidado, pero, dijo, el plan no se ejecutó por la intermediación de la comunidad internacional. "Iban a asaltar la embajada (de Brasil) y declarar un suicidio por mi parte, pero José Manuel Zelaya no se está suicidando", ha afirmado el mandatario de Honduras en una entrevista telefónica con la cadena de televisión argentina TN.

El plan del Gobierno de facto, ha explicado Zelaya, se paró porque "la comunidad internacional intervino inmediatamente, incluido Estados Unidos y la OEA (Organización de Estados Americanos)". "Hoy todavía se corre el riesgo de que sea asaltada la embajada y que se planifique que iba a ser anunciado un suicidio de parte mía como para simular que nosotros habíamos decidido morir antes de que entraran aquí", ha insistido. Según Zelaya, con él se encuentran en la embajada de Brasil alrededor de cien personas que están soportando "bombardeos con productos químicos y ondas de ultrasonido que provocan malestar a la salud y ponen muy nerviosas a las personas".

"Han allanado casas vecinas a la embajada", rige "un estado de sitio total" con "miles de prisioneros y personas heridas en los hospitales" en un contexto de "terrible situación de inseguridad", ha afirmado. Zelaya dijo que está en contacto "permanente" con el gobernante brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, "y otros presidentes" que asisten a la Asamblea General de la ONU, y ha expresado su confianza en que prospere la convocatoria al Consejo de Seguridad de la ONU de modo de contribuir a que Honduras "recupere la paz y el diálogo".