Millones de georgianos eligen presidente, con Margvelashvili como favorito

Tiflis, 27 oct.- Miles de georgianos votan desde primera hora de hoy para elegir nuevo presidente de este país causasiano, en unos comicios con 23 aspirantes aunque las encuestas apuntan a un solo favorito.

"Espero obtener más del 50 por ciento de los votos", declaró Gueorgui Margvelashvili, candidato de la coalición gobernante Sueño Georgiano y favorito a la victoria, al depositar su papeleta en la urna en el colegio de la calle Chitadze de Tiflis.

Cerca de 3,5 millones de georgianos están convocados a las urnas en unos 3.655 lugares de votación que abrieron hoy a las 8:00 (hora local) para determinar quién regirá los destinos en Georgia en los próximos cuatro años.

Otros 52 colegios electorales abrieron sus puertas fuera del territorio georgiano, en 44 ciudades de un total de 37 países.

Por su parte, más de 1.500 militares georgianos, que participan en la misión de paz de la OTAN en la provincia afgana de Helmand, ya han votado en dos colegios electorales en bases militares de este país.

La excepción es Rusia con quien Georgia lleva 5 años sin mantener relaciones diplomáticas después de que Moscú reconociera la independencia de la separatista república georgiana de Osetia del Sur a raíz de la guerra en 2008 entre ambos países por el control de ésta.

Un total de 19.746 observadores locales de 65 organizaciones y 1.241 de 60 instituciones internacionales vigilaran el discurrir de la cita electoral.

Los resultados preliminares se anunciarán una vez recogidos los resultados de los sondeos a pie de urna encargados a dos empresas: GFK de Alemania y AST de Georgia.

Todas las encuestas indican que Margvelashvili ganará los comicios con mayoría absoluta, muy por delante de David Bakradze, el candidato del Movimiento Nacional Unido (MNU) que lidera el actual presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili.

Las elecciones de hoy marcan la culminación de la transición del sistema político georgiano de uno presidencialista a uno presidencialista-parlamentario, que contará con un primer ministro de amplios poderes nombrado por el Parlamento.