Washington, 11 abr.- Los ministros de Exteriores del G8 abrieron hoy su reunión de dos días en Washington con propuestas para garantizar que se cumple el alto el fuego prometido por Bachar al Assad en Siria y la posibilidad de avanzar nuevas medidas contra la violencia en el país.
En la apertura de la sesión plenaria hoy, la anfitriona, la secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, dijo que su país "está alarmado por la continua violencia en Siria, y preocupado por los problemas a los que se enfrenta el enviado especial Kofi Annan en sus intentos de lograr un alto al fuego y un fin a la violencia".
El plan de Annan da un ultimátum para el fin de la violencia a partir del día 12, pese a lo cual hoy, en la víspera, los activistas opositores denunciaron la muerte de cerca de 40 personas, entre ellas dos mujeres y cuatro menores, en distintas acciones de represión de las fuerzas del régimen.
El grupo de las siete naciones más industrializadas -Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Italia, Japón- más Rusia, puso sobre la mesa durante la sesión plenaria y durante la cena de trabajo la necesidad de garantizar el fin de la violencia en Siria, así como el programa nuclear iraní y el lanzamiento de un cohete norcoreano.
El ministro de Exteriores británico, William Hague, dijo a un grupo de informadores que si no se certifica el alto el fuego por parte de las fuerza armadas sirias, Reino Unido solicitará que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas intensifique las sanciones contra Damasco.
Hague añadió que en ese caso "intensificaremos nuestro apoyo a la oposición", en un nuevo paso para asegurar que el Gobierno de Assad caiga y deje paso a un proceso de transición.
El jefe de la diplomacia francesa, Alain Juppé, aseguró que el Gobierno galo presionará al Consejo de Seguridad para que adopte una resolución que contemple el despliegue de una fuerza de observadores sobre el terreno.
En el debate sobre Siria estuvo presente el ministro de Exteriores turco, Ahmed Davutoglu, a través de videoconferencia, en la que pudo tratarse la propuesta de Ankara para crear una zona neutral en territorio sirio que permita garantizar la seguridad de los refugiados.
Según la CNN, la medida ya fue discutida esta semana por Clinton y Davutoglu después de que el lunes murieran dos personas por los disparos a un grupo de refugiados que estaban entrando en Turquía.
Clinton dijo hoy que tiene previsto reunirse bilateralmente durante la reunión ministerial del G8 con su homólogo ruso, Sergei Lavrov, al que podría pedir la colaboración de Moscú para que se tomen medidas más contundentes contra el régimen de Damasco.
Naciones Unidas estima que unas 9.000 personas han fallecido desde marzo de 2011 como resultado de la represión del régimen de Assad contra grupos rebeldes, mientras que miles de personas se han visto obligadas a abandonar las ciudades asediadas y buscar refugio en campos en las fronteras de Turquía y Líbano.
Otro de los temas centrales de este encuentro, preparatorio de la cumbre de los líderes del G8 que tendrá lugar el 18 y 19 de mayo en Camp David (estado de Carolina del Norte), fue el programa nuclear de Irán y el mantenimiento de las sanciones contra el régimen.
El G8 quiere aunar posturas antes de que el 14 de abril en Estambul se inicie la primera fase de conversaciones de Irán con grupo 5+1 (los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania).
Según Clinton, la cita "es una oportunidad para Irán de enfrentar seriamente las preocupaciones de la comunidad internacional sobre su programa nuclear", que EE.UU. duda que tenga fines solamente civiles como aseguran las autoridades del país.
"Creemos que aún queda tiempo para la diplomacia, pero es urgente que los iraníes se sienten a la mesa para crear un ambiente que conduzca a lograr resultados concretos a través de un proceso sostenido", agregó la secretaria de Estado.
Los ministros hablaron también sobre el lanzamiento previsto por Corea del Norte para esta semana de un satélite incorporado a un cohete de largo alcance, un plan sobre el que Japón buscará una condena abierta.
El régimen de Pyongyang podría proceder con el lanzamiento de su satélite en las próximas horas o días, algo que para Estados Unidos, Japón y Corea del Sur es una tapadera de un test de un misil y una provocación que contraviene las sanciones de Naciones Unidas.
En el almuerzo que precedió a las dos sesiones plenarias de hoy, los ministros dialogaron también sobre otros "asuntos trasnacionales", como el terrorismo, la piratería o la seguridad alimentaria, según Clinton.
Al cierre de mañana, se espera que los ministros del G8 detallen la implementación del compromiso expresado por los líderes del grupo el año pasado en Deauville (Francia) para otorgar 40.000 millones de dólares (28.000 millones de euros) en ayudas a los países de la "primavera árabe" y apoyar sus reformas políticas y económicas.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios