Montilla defiende un compromiso con Cataluña sin "aventuras" soberanistas

Barcelona.- El presidente catalán, José Montilla, ha ofrecido hoy su "compromiso con Cataluña" desde la serenidad y la firmeza, con una defensa "sin marcha atrás" del Estatut pero alejado de "aventuras, sorpresas e inventos" soberanistas, una velada crítica a la consultas independentistas avaladas por CiU y ERC.

"Cataluña no puede parecer como aquellas criaturas mal criadas que desean con deleite e insistencia un juguete magnífico y, cuando lo tiene lo abandonan, reclamando otra vez uno nuevo ... sin, ni siquiera, abrir la caja, sin disfrutarla. No podemos cultivar la insatisfacción y el capricho", ha subrayado Montilla en el tramo final de su discurso, de una hora y 45 minutos, en la jornada inaugural el debate de política general en el Parlament.

El presidente ha recordado que este es el último debate de política general, puesto que el año que viene, por estas fechas, "estaremos cerca de las elecciones catalanas", un comentario que ha subrayado así el carácter político y preelectoral del máximo dirigente de los socialistas catalanes, en un discurso en el que ha desgranado su "amor" por el país.

Montilla ha recordado a CiU que a él no le "molesta" el Estatut porque -ha dicho- "lo voté y defenderé con total y absoluta convicción de que es lo mejor para Cataluña", por lo que ha pedido: "que la impaciencia no nos impida disfrutar, desarrollar y aprovechar lo que tenemos, que es mucho y que está apenas por explorar".

"Creo que corremos el peligro de generar una constante insatisfacción enfermiza si no somos capaces de abrir un largo período de serenidad y tranquilidad para desarrollar el mayor instrumento de autogobierno que nunca hemos tenido en nuestra historia", ha apuntado Montilla.

Las críticas a la tensión política que genera "aventuras" como la consulta de Arenys de Munt (Barcelona), que no ha citado explícitamente, han ido dirigidas principalmente a CiU.

CiU es una fuerza que apoyó y colideró el nuevo Estatut y que, sin embargo, ahora apoya consultas soberanistas que van mucho más allá del texto autonómico, al tiempo que el propio líder de CiU, Artur Mas, se ha declarado abiertamente independentista.

Por este tema y otros debates poco pegados a la realidad, según Montilla, ha hecho una especial mención a la "rivalidad" con la oposición: "Creo, sinceramente, que la política catalana puede quedar atrapada por el exceso retórico, verbal o táctico. Que podemos enloquecer, si la carrera permanente por el titular o la declaración gruesa y la competitividad extrema en el terreno político y electoral nos lleva a una incapacidad para ver la realidad como es, para medir y ponderarla, para repensarla".

"Tenemos que centrar la política catalana en el despliegue del Estatuto. Son contraproducentes las declaraciones políticas que cuestionan, sólo tres años después de su entrada en vigor, el carácter estratégico de este gran instrumento", ha concluido.

Además, Montilla ha advertido de que "Cataluña se la juega si no sabe sacar provecho de este Estatuto, porque puede entrar en una dinámica de poca credibilidad si ahora, en vez de desplegarlo, se dedica a menospreciarlo o no darle la centralidad que merece y que necesitamos".

"Algunos quieren ir demasiado rápido ... Pero no podemos acelerar el país dejándolo desconcertado y desorientado. La prisa nos puede perjudicar. Es tiempo de buena letra y líneas rectas. A quienes, legítimamente, todo les parece demasiado lento, debemos decir que, para llegar lejos, es preciso, aunque siempre, llegar con todos. Yo también quiero ir lejos, pero con todos a la vez, y a tiempo. No a destiempo y sin la mayoría", ha agregado.

En este sentido, Montilla se ha comprometido como presidente de la Generalitat a que "Cataluña no puede perder la cabeza" ni pondrá "nunca en riesgo la cohesión social y la unidad civil. Ni la solvencia y la fortaleza de nuestras instituciones. Ni el respeto de Cataluña de cara al exterior", ha apuntillado.