Muere una cuarta persona por actuación de Policía sudafricana en una protesta

Johannesburgo, 20 ene.- Una cuarta persona murió hoy en Sudáfrica como consecuencia de la actuación de la Policía durante una protesta contra los cortes de agua corriente ocurrida la semana pasada en la ciudad de Brits, en la provincia del Noroeste.

La última víctima, de 36 años, falleció en el hospital después de una semana en coma en la unidad de cuidados intensivos, donde ingresó tras ser alcanzada el pasado lunes por una bala disparada por la Policía durante las manifestaciones de Brits, manifestaron fuentes de la familia a la radio pública sudafricana, SABC.

Otras dos personas murieron el lunes pasado por disparos de la Policía en la misma protesta, en el antiguo gueto negro de Mothotlung (Brits).

Un día después, otro vecino de la zona, que había sido detenido por los agentes durante la manifestación, perdió la vida tras caer de un vehículo policial en marcha mientras era trasladado a la comisaría.

Pese a que la Policía asegura que la víctima había intentado escapar, los testigos indicaron que fue empujado del vehículo por los propios agentes.

Cientos de habitantes de Mothotlung salieron a la calle la semana pasada para protestar por la falta de agua corriente en el barrio, después de que las tres bombas de agua municipales que surten a la comunidad se estropearan al mismo tiempo y dejaran a los residentes sin suministro durante una semana.

La actuación de la Policía en Brits ha sido duramente criticada en Sudáfrica, que durante 2013 ha vivido varios episodios de uso excesivo de la fuerza por parte de los agentes en huelgas y en las habituales protestas en las zonas más deprimidas por las deficiencias de los servicios públicos.

Según Amnistía Internacional (AI), la Dirección Independiente de Investigación de la Policía (IPID, en sus siglas en inglés) recibió, entre abril de 2011 y marzo de 2012, hasta 720 notificaciones de muertes bajo custodia policial o con implicación de las fuerzas del orden.

La prensa sudafricana ha relacionado las muertes de Brits con la masacre de la mina de Marikana, también en la provincia del Noroeste, donde la Policía sudafricana mató a 34 mineros al disparar contra una protesta sindical en agosto de 2012.