México, 14 ago.- Cuatro presuntos delincuentes murieron hoy en un enfrentamiento con soldados del Ejército mexicano en la ciudad de Reynosa, en el norteño estado de Tamaulipas, informó la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
La dependencia precisó en un comunicado que durante la realización de reconocimientos terrestres en esa fronteriza con McAllen, Estados Unidos, las tropas "fueron agredidas con disparos de armas de fuego por un número indeterminado de individuos".
En el enfrentamiento subsiguiente fallecieron cuatro agresores "cuya identidad hasta el momento se desconoce", precisó.
La Sedena señaló que los militares también decomisaron cuatro armas largas, un arma corta, un vehículo y cargadores y cartuchos de diferentes calibres.
Refirió asimismo que "en un intento fallido de obstaculizar y distraer la acción del personal militar en las operaciones que llevaba a cabo para neutralizar a los agresores, miembros de la delincuencia organizada realizaron una serie de bloqueos utilizando vehículos en distintos puntos del citado municipio, mismos que posteriormente fueron retirados".
El comunicado señaló que los cuerpos y el material decomisado fueron entregados a las autoridades correspondientes y destacó que estos hechos "no se relacionan de forma alguna" con la escalada de violencia en el vecino estado de San Luis Potosí.
México vive desde hace varios días un recrudecimiento de la violencia vinculada al crimen organizado, que ha trascendido al ámbito político pese a una campaña electoral relativamente tranquila que culminó en los comicios del 1 de julio.
Édgar Morales Pérez, alcalde electo del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y un colaborador suyo fueron asesinados el domingo pasado en Matehuala, estado de San Luis Potosí.
El PRI, cuyo candidato presidencial Enrique Peña Nieto ganó en unos comicios que han sido impugnados por una coalición de izquierda, condenó los hechos y demandó "de las autoridades competentes que se esclarezcan y se castigue a los responsables".
Estas y otras acciones criminales se inscriben en una ola de violencia que vive México y que ha causado más de 50.000 muertes desde diciembre de 2006, la mayoría asociadas a acciones de grupos del crimen organizado en pugnas entre sí o contra las autoridades.
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