Kabul.- Tres niños murieron y otros cuatro resultaron heridos, todos miembros de una misma familia, por el ataque de un mortero lanzado por supuestos insurgentes en la provincia norteña afgana de Kunduz, informó hoy una fuente oficial.
El mortero alcanzó anoche una vivienda en el distrito de Chahar Dara, en la provincia de Kunduz, lo que provocó la muerte de tres niños de entre 5 y 10 años e hirió a los otros cuatro, dijo a Efe el gobernador del distrito, Abdul Momen Omarkhil.
El gobernador del distrito culpó directamente a militantes talibanes del ataque y aclaró que la casa alcanzada se encontraba próxima a un control de Policía en el área de Aai Khanum.
Según un informe de la misión de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) publicado a comienzos de junio, el número de civiles muertos durante los primeros seis meses de 2011 fue el más alto desde que comenzó la guerra en el país centroasiático hace casi una década.
Afganistán registró 1.462 víctimas civiles entre enero y junio, un aumento del 15% respecto al mismo período del año anterior, por muertes causadas en la mayoría de los casos por la acción de los insurgentes y por la explosión de minas en las carreteras.
El pasado 2010, con 2.777 víctimas mortales, fue el año más mortífero para la población civil desde la invasión en 2001 de Afganistán por las tropas de EEUU y la caída del régimen talibán.
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