Mujica dice que América Latina necesita presencia "luchadora" de Fernández

  • El presidente de Uruguay, José Mujica, le deseo hoy una "pronta recuperación" a la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, operada esta mañana para drenar un hematoma craneal, y destacó que América Latina "necesita su presencia luchadora y militante".

Montevideo, 8 oct.- El presidente de Uruguay, José Mujica, le deseo hoy una "pronta recuperación" a la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, operada esta mañana para drenar un hematoma craneal, y destacó que América Latina "necesita su presencia luchadora y militante".

"Esperamos que se pueda recuperar con rapidez porque Argentina y más en general América Latina necesitan su presencia luchadora y militante", dijo Mujica en su audición semanal en una radio pública de Montevideo.

El presidente uruguayo señaló que espera que "el vasto mundo cristiano al que pertenece ruegue por la salud de la mandataria".

Y agregó: "Un Gobierno puede ser bueno, puede ser regular, pero lo peor que nos pueda pasar a cualquier país es no tener Gobierno".

"Espero que la sociedad argentina tenga la paciencia necesaria para esperar la recuperación de Cristina", señaló Mujica.

Los Gobiernos de Uruguay y Argentina están sumidos desde la pasada semana en una nueva polémica tras la decisión de Mujica de permitir un aumento de la producción de la planta de celulosa de la finlandesa UPM (ex-Botnia) de 1,1 a 1,2 millones de toneladas al año.

Como reacción, la Administración de Cristina Fernández anunció la interposición de un recurso frente a la Corte Internacional de Justicia de La Haya, donde anteriormente se celebró un juicio por el mismo caso.

Las autoridades argentinas y grupos de vecinos de la ciudad argentina de Gualeguaychú, frente a cuyas costas se encuentra la planta, la rechazan con el argumento de que puede generar contaminación en la zona.

La construcción de la fábrica, a mediados de la pasada década y con una inversión de 1.800 millones de dólares, la mayor en la historia uruguaya, motivó el peor enfrentamiento en décadas entre ambos Gobiernos.

Además, grupos de ambientalistas argentinos bloquearon durante mas de tres años el principal puente entre ambos países como forma de protesta contra la planta.

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