Otegi recibía el alias de “ronaldhino”, pero sus “quiebros” no le han permitido pasar “la raya de lo legal”


El fiscal de la Audiencia Nacional Vicente González Mota aseguró hoy que el exportavoz de Batasuna Arnaldo Otegi recibía dentro del entramado de “Bateragune”, con el que supuestamente se intenta reconstruir la formación ilegalizada, el alias de “Ronaldinho” por su “habilidad para hacer estrategias”, pero mantiene que sus “quiebros” no le han llevado todavía a la legalidad y a la ruptura con ETA.
“Seguimos haciendo quiebros, estructuras, pero al término del partido, seguimos estando en el lado de la ilegalidad, en el lado del soporte a ETA “, aseguró González Mota.
El fiscal hizo esta reflexión en el trámite de conclusiones del juicio que la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional está celebrando contra Otegi y el resto de procesados por intentar presuntamente reconstruir la ilegalizada Batasuna a las órdenes de ETA, a través del proyecto denominado “Bateragune”.
El representante del Ministerio Público explicó que ha cambiado su calificación inicial y que considera ahora que Otegi y Díez Usabiaga son “dirigentes” de organización terrorista porque, por su “experiencia” y “conocimiento”, fueron los encargados de transmitir las tesis de “Bateragune” a los jóvenes del entramado. “No lo hacemos porque se llamen de una u otra forma, entendemos que son los líderes”, dijo antes de añadir que Otegi “es el líder de la estructura, es un referente”.
González Mota dijo, además, que la Fiscalía no pide la condena para los procesados porque opine que el “cambio de estrategia” en la izquierda abertzale ha estado “motivada por razones utilitaristas”, sino porque considera que “se están reestructurando todavía del otro lado de la ley”.
El representante del Ministerio Público destacó que no tiene sentido que la reflexión en la izquierda abertzale sobre el nuevo ciclo y la ruptura la violencia se llevase a cabo a partir de diciembre de 2006, tras el atentado de la T4, tal y como defienden los acusados, ya que en octubre de 2007 se desarticuló la cúpula directiva de Batasuna y en 2008 se actuó contra PCTV y ANV porque “se seguían instrumentalizando formaciones políticas”.
“Ninguno de los acusados ha condenado la violencia ni ha pedido a ETA que deje la violencia, ni en la documentación intervenida aparece ni el asomo de condenar la violencia”, señaló el representante de la Fiscalía.

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