Policías rechazan la “violencia moral” sobre los políticos

La Confederación Española de Policía (CEP) dijo hoy que los tribunales han considerado ilegal la “violencia moral de alcance intimidatorio” contra los políticos, en referencia al escrache sufrido este domingo por el dirigente del PP Carlos Floriano, en cuyo domicilio de Cáceres fueron colgados carteles de “Se busca”.
Ignacio López, secretario general de la CEP, dijo a Servimedia que en España “hay jurisprudencia más que de sobra” para afrontarse estos actos de protesta “desde una manera en que se garantice la integridad moral de los políticos”.
En este sentido, el escrache en el domicilio de Floriano fue promovido por afectados por los desahucios y por la llamada Plataforma por la Renta Básica en Extremadura, que sostuvieron que su actuación era "un acto absolutamente cívico y no violento".
A este respecto, López dijo que “el Constitucional y diversos tribunales superiores de justicia se han pronunciado en diversas ocasiones sobre que la libertad de pensamiento y el derecho de reunión y manifestación no comprenden la posibilidad de ejercer sobre terceros una violencia moral de alcance intimidatorio”.
“En ese marco jurídico es en donde está actuando la Policía”, aseguró este responsable de la CEP, quien dijo que, ante los escraches, los agentes deben tener en cuenta si se está ante “hechos delictivos; hechos susceptibles de ser sancionados administrativamente; o situaciones perfectamente recogidas en el derecho de manifestación”.
Añadió que las “sucesivas órdenes” que se han dado en este punto desde el Ministerio del Interior “no hacen más que ratificar ese escenario jurídico, que no ha sido cambiado por la aparición de los escraches”.
En este sentido, López estimó que, en conjunto, la Policía está actuando bien frente a los escraches, ya que está interviniendo “de una forma proporcionada” y “bastante racional”.
Asimismo, insistió en que “la libertad de pensamiento o el derecho de reunión y manifestación no prevalecen sobre la posibilidad de ejercer violencia moral de alcance intimidatorio contra terceros”.