Puigdemont fija la independencia como la prioridad de su Gobierno

    • En 18 meses quiere tener lista una Constitución de Cataluña.
    • Copia el programa de Artur Mas e impulsará una Hacienda y un Banco Central propios.

"Independencia". "Una Cataluña independiente". "Un país". Estas son algunas de las palabras que ha pronunciado Carles Puigdemont en su discurso de investidura en el Parlament. La soberanía es la prioridad de su Gobierno.

Puigdemont se ha presentado en el Parlament con un discurso de país. Un país propio. Está dispuesto a echar un pulso al Estado, sin medias tintas, ya que para eso le han elegido. El ya exacalde de Gerona va a poner toda la carne en el asador para conseguir la independencia porque dice, no es un proyecto político. Es un proyecto social, que piden los catalanes, que la calle reclama, ha defendido.

Una Hacienda propia, un banco central diferente al español, la gestión de infraestructuras propias, programas para fomentar el empleo... Todo ello, claro está, sin contar con el Estado. Independencia, cuanto antes, ha sido el tema central de un discurso de investidura que ha preparado en menos de 24 horas.

Puigdemont ha hecho suyo el programa de Artur Mas, que le ha mirado muy serio desde su escaño del Parlament en todo momento. Es decir, en 18 meses tiene previsto aprobar una Constitución catalana. El Estado ya está preparado para responder, pese a que el Gobierno se encuentra en funciones. Y es que la maquinaria legal no se ha detenido en ningún momento.

En el Gobierno de Puigdemont habrá un único vicepresidente, Oriol Junqueras, que se encargará del área económica, y será considerado superconseller. Los otros dos serán Munté, que será la responsable del área social y la portavoz del Govern, y Romeva, al frente del área internacional. En total, el Ejecutivo catalán tendrá 13 consejerías.

Algunas propuestas que ha lanzado Puigdemont en su discurso son construir la línea 9 de metro en Barcelona, un sistema de becas para ampliar la presencia de jóvenes en la universidad, un programa de apoyo a Pymes y autónomos, un acuerdo para acoger refugiados en Cataluña o una renta mínima de insercción, entre otras.

Carles Puigdemont ha fijado cinco líneas de actuación prioritaria para su Govern:

1. Culminación del procés en su parte ciudadana y participativa.

2. Diseño definitivo de las estructuras de un Estado propio y su puesta a punto.

3. Tramitación de proyectos de ley que permitan la desconexión con España.

4. Constitución de un Estado catalán independiente de España.

Toda una declaración de intenciones que asusta en el Gobierno. Hay temor ante lo que pueda hacer Puigdemont, al que califican de "radical". La solución no parece fácil, aunque en Moncloa creen que la situación les favorece: el PSOE tendrá ahora más difícil un pacto con un Podemos que no renuncia a convocar un referéndum en Cataluña y Rajoy se erige en este momento como el único candidato a presidente capaz de garantizar una respuesta contundente al desafío.

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