Reforma laboral. El psoe insiste en que es “un ajuste de cuentas con el estado social”

La dirección del PSOE insistió este lunes en que la reforma laboral es “un ajuste de cuentas con el Estado social” y volvió a emplazar al Gobierno a negociar con los sindicatos para evitar la huelga general que considera “legítima”.
La reforma laboral, las recientes movilizaciones y la huelga general ya convocada por los sindicatos estuvieron sobre la mesa en la reunión de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, de la que dio cuenta después en rueda de prensa la vicesecretaria general, Elena Valenciano.
Esa reforma, insisten los socialistas, agravará la crisis económica y destruirá más empleo, y no está determinada por la necesidad de un ajuste económico, sino que es “un ajuste de cuentas con el Estado social, algo que la derecha siempre quiso hacer” y que ahora intenta con la “coartada” de la crisis y utilizando una herramienta “muy potente”, su mayoría absoluta.
Prueba de que esta reforma “cebará” el desempleo en vez de frenarlo es, en opinión de Elena Valenciano, el hecho de que el Gobierno “se ha desligado” de la idea de que sea así y por eso prevé que este año acabará con 600.000 desempleados más.
En contra de la reflexión de la ministra de Trabajo, Fátima Báñez, el PSOE cree que esta reforma perjudica tanto a la paz social como a los intereses generales, y en contra de la promesa del presidente, Mariano Rajoy, temen que las reformas no sean ni justas, ni equitativas, ni razonables, porque en ese caso ya habrían presentado los Presupuestos.
Por todo ello, el PSOE cree que no se habría llegado a este punto si el Gobierno hubiera escuchado a los sindicatos “la mitad de tiempo” que ha dedicado a la patronal de los empresarios, y está en manos de Rajoy evitar una huelga “legítima” que está dentro de los mecanismos con los que los sindicatos defienden los derechos de los trabajadores.
Durante años los sindicatos se han comprometido con la paz social, subrayó, y tienen ahora la misma responsabilidad que cuando llegaron al acuerdo de moderación de rentas. Por ello, denunció, es “intolerable” que se trate de minar su credibilidad, y tiene “mucho que ver con cómo la derecha gestiona los conflictos”.
Valenciano juzgó comprensible que la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, esté “inquieta” por las movilizaciones, pero es “mentira”, añadió, que el PSOE haya convocado protesta alguna, porque eso lo hacen los sindicatos y los socialistas trabajan en el Parlamento y con los instrumentos democráticos a su alcance para el mismo objetivo, oponerse a la reforma y defender alternativas.