Yaundé, 9 oct.- Los retrasos y la falta de material electoral han caracterizado la jornada electoral de los comicios presidenciales de hoy en Camerún, que contaron con una baja participación.
En algunos barrios de Duala, la ciudad más poblada del país, las votaciones comenzaron con hasta cinco horas de retraso, a lo que se sumó la ausencia de papeletas de todos los partidos participantes en las elecciones, mismo problema registrado en algunos colegios electorales de la capital, Yaundé.
"No vale la pena votar. Viendo la forma en la que están organizadas las cosas, todo está predispuesto para que gane (el presidente camerunés, que lleva casi 29 años en el poder) Paul Biya. Yo he venido a votar y pero prefiero volver a casa sin hacerlo", declaró a Efe un elector, bajo condición de anonimato.
Poco antes del cierre de urnas, previsto para las 17 GMT, los colegios electorales no presentaban largas filas y, en general, la jornada registró una baja participación.
"Aquí hay 458 votantes registrados y hasta ahora sólo ha acudido a depositar la papeleta medio centenar", señaló Paul Ombiono, responsable del colegio electoral del barrio capitalino de Bastos, donde ejerció su derecho a voto Biya, candidato a la reelección por la gobernante Reagrupación Democrática del Pueblo Camerunés (RDPC).
Según varios electores, la baja participación podría deberse al mensaje, difundido por Internet, del reverendo Bertin Kisob, un sacerdote y líder de un improvisado grupo armado que anunció el inicio de la revolución en Camerún para evacuar del poder a Biya.
Por este motivo, Kisob pidió a los cameruneses que boicotearan las elecciones y que hicieran acopio de provisiones en sus casas.
El pasado 29 de septiembre, un grupo de manifestantes armados bloqueó el puente de Wuri, el más importante de Duala, para exigir la dimisión de Biya, una acción que reivindicó Kisob en su blog.
La ausencia de papeletas de algunos de los grupos políticos participantes en las cabinas de votación se unió a la falta de tarjetas de votación denunciada por algunos electores.
Asimismo, en Bamenda (suroeste de Camerún, bastión del opositor Frente Democrático Social, SDF), varios votantes aseguraron telefónicamente a Efe que "responsables del partido de Biya están pagando unos cuatro dólares a cada votante que sale del colegio electoral con la papeleta del SDF sin usar".
Sin embargo, fuentes de la Comisión Electoral de Camerún (Elecam) aseguraron que la jornada ha transcurrido con normalidad.
El director general de la Elecam, Mohaman Sani Tanimou, indicó que "los testimonios que llegan de los cuatro rincones del país son positivos".
La misma opinión sostiene Kalep Fopa, de la misión de observación de la Commowealth, quien sostiene que en los distritos de Yaundé visitados las votaciones se están realizando sin aparente coacción.
Además de Biya, otros 22 candidatos optan a la Presidencia de Camerún, entre los que destaca John Fru Ndi, del SDF, quien derrotó a Biya en los primeros comicios presidenciales pluripartidistas, en 1992.
Esas elecciones fueron calificadas de fraudulentas por diversos observadores internacionales, entre ellos Estados Unidos, puesto que el Tribunal Supremo local terminó por conceder la victoria a Biya, segundo mandatario que han conocido los cameruneses 51 años después de que este país de África occidental proclamara su independencia.
Aunque ninguna organización ha llevado a cabo encuestas sobre quién será el vencedor de estos comicios, la totalidad de los analistas señala como ganador a Biya, uno de los jefes de Estado africanos que más tiempo llevan en el poder.
La Comisión Electoral aseguró que anunciará los resultados definitivos de los comicios el próximo día 24 de octubre, aunque fuentes de la Elecam aseguraron que se espera publicar cifras provisionales a lo largo de la semana próxima.
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