Rohani, candidato de unidad reformista surgido de largo camino revolucionario

  • Un clérigo chií con un largo historial revolucionario, Hasan Rohani, se ha convertido en el candidato de consenso del sector reformista moderado del régimen islámico de Irán para las presidenciales del 14 de junio, tras una campaña en la que ha apelado a la moderación y la mejora de las relaciones exteriores.

Teherán, 13 jun.- Un clérigo chií con un largo historial revolucionario, Hasan Rohani, se ha convertido en el candidato de consenso del sector reformista moderado del régimen islámico de Irán para las presidenciales del 14 de junio, tras una campaña en la que ha apelado a la moderación y la mejora de las relaciones exteriores.

Nacido el 12 de noviembre de 1948 en la ciudad Sorje, en la provincia norteña de Semnan, con el nombre de Hasan Fereidum, posteriormente cambio su apellido por Rohani.

Según se explica en su propia página web oficial, a los trece años ingresó en un centro religioso musulmán de su provincia y, posteriormente, se traslado a Qom, donde se encuentran los principales seminarios del Islám chií.

Rohani, considerado un pragmático cercano al ex presidente reformista moderado Akbar Hashemi Rafsanyani, también ha gozado de una buena relación con el líder supremo, ayatolá Ali Jamenei, con el que ha colaborado desde la época de la guerra con Irak, de 1980 a 1988.

A partir de 1969, diez años antes de la Revolución Islámica encabezada por el ayatolá Ruhola Jomeini, compaginó los estudios religiosos con los laicos en la Universidad de Teherán y, en 1972, obtuvo una licenciatura en Derecho en la capital del país.

Rohani fue seguidor del ayatolá Jomeini desde joven y, con sólo 17 años, en 1965, empezó a recorrer Irán para realizar una campaña en contra del sha Mohamed Reza Palevi, que gobernaba el país de forma dictatorial.

Ya en su primera gira, fue detenido por la Policía Política del régimen del sha, la Savak, y fichado como sedicioso.

En 1977, dos años antes de la Revolución, fue el primero en dar a Jomeini el título de Imán, con lo que le reconocía la máxima autoridad en el Islám chií duodecimalista que rige en Irán, en un discurso en la mezquita del Gran Bazar de Teherán, un centro de comercio milenario y tradicionalmente religioso y conservador.

Tras ese discurso, se vio de nuevo perseguido por la Savak y, por recomendación de algunos destacados clérigos, escapó del país y se fue al Reino Unido, donde realizó un máster en Derecho Constitucional en la Universidad de Glasgow Caledonia.

Durante su estancia en el Reino Unido, Rohani hizo una abundante labor proselitista entre los estudiantes iraníes de ese país y de Francia,

donde estaba exiliado Jomeini y donde se traslado con frecuencia.

Su regreso a Irán se produjo al tiempo que el del ayatolá Jomeini, a principios de 1979, y a partir de ese momento ocupó numerosos cargos,

tanto en el mando militar de la guerra contra Irak como en la vida política del país.

Desde el años 1980 hasta el 2000 fue parlamentario, también ha estado en la Asamblea Consultiva y es miembro del Consejo del Discernimiento,

donde dirige el Centro de Estudios Estratégicos de Irán.

Durante la guerra con Irak, de 1980 a 1988, tuvo diferentes cargos y estuvo seis años en el Consejo Superior de la Defensa, junto a Jamenei y Rafsanyani, este último convertido en su mentor, y dirigió la Defensa Aérea de Irán.

Desde 1989 hasta 2005 Rohani, bajo los gobiernos reformistas de los ex presidente Rafsanyani y Mohamed Jatami, ocupó la secretaría del Consejo Supremo de Seguridad Nacional y, los dos últimos años, fue el encargado de la negociación internacional sobre la cuestión nuclear de Irán.

A partir de 2003, en el enfrentamiento que se produjo entre Irán y el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rohani dirigió las negociaciones internacionales y llegó a acordar medidas de confianza y cesar algunas actividades del programa nuclear iraní, con lo que se calmaron las aguas en la escena exterior.

Ahora, al convertirlo en candidato único de consenso, los reformistas moderados tratan de atraer el voto de los desencantados con el régimen y, en principio, forzar una segunda vuelta en las elecciones, que sería el 21 de junio y en la que esperan que Rohani sea uno de los dos candidatos.

Enfrente tendría a uno de los cuatro ultraconservadores del entorno de Jamenei que quedan en liza y que sería el favorito del sistema islámico que controlan el líder supremo y el clero, junto con los militares del Cuerpo de Guardianes de la Revolución.

Rohani está casado y tuvo tres hijos, de los que uno falleció, y dos hijas.

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