Rubio: la foto de Rus sentado en el banquillo perjudica aún más la imagen de la Diputación

Valencia.- El portavoz socialista en la Diputación de Valencia, Rafael Rubio, ha lamentado hoy que la foto del presidente de la corporación provincial, Alfonso Rus, "sentado en el banquillo perjudica muy seriamente la imagen y el buen nombre de esta institución".

Rubio se ha referido así, en un comunicado, a la citación que tenía hoy el también alcalde de Xàtiva en el juzgado de Instrucción número 2 de esta localidad para responder de los insultos que profirió contra tres profesores de valenciano durante un acto público celebrado el 25 de abril de 2009.

En el acto, Rus llamó a los docentes "gilipollas" por decir expresiones como "aleshores" y "gairebé", y afirmó que iba a ir "a por ellos" y a "rematarlos".

A juicio de Rubio, esta situación "la ha provocado el propio Rus con su incontinencia verbal y sus excesos y con su negativa a rectificar públicamente en el pleno de la Diputación".

El grupo socialista en la Diputación presentó una moción para que Rus "pidiera disculpas públicas" y mostrara su "apoyo y reconocimiento" a los profesores que enseñan y hablan el valenciano normativo.

"Sin embargo, el presidente provincial, lejos de rectificar vetó la moción socialista y se reafirmó en sus declaraciones", ha señalado el portavoz socialista.

Rafael Rubio ha criticado que un presidente "que antepone su orgullo personal" antes que el "respeto a los profesionales y a los intereses de esta administración pública" no merece, a su juicio, "ocupar ese lugar".

Además, ha advertido de que la "actitud de Rus y sus palabras dañan cada día más la imagen de esta institución" y ha recordado que hoy "está sentado en el banquillo por insultar a los profesores, pero hace unos meses protagonizó uno de los episodios más lamentables que ha vivido este país con la censura de las fotos de la exposición Fragments d'un Any en el MuVIM".

Para el diputado socialista, Rus "ha demostrado que no tiene límites" y cree que la corporación provincial "es su cortijo particular" desde el que puede "insultar a los profesores, amenazar a los alcaldes con recortar ayudas si defienden a los docentes, censurar exposiciones o nombrar a un director a dedo porque es su amigo personal y milita en el PP".