Bucarest, 7 sep.- El Ministerio de Exteriores rumano ha calificado de infundados los comentarios del comisario de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Thomas Hammarberg, sobre la existencia de centros secretos de interrogatorios de la CIA en Rumanía, Polonia y Lituania.
"La credibilidad y la veracidad de estas informaciones y fuentes no pueden ser verificadas", ha argumentado el ministerio en un comunicado que reproducen hoy los medios rumanos.
El ministerio insiste en su nota en que las investigaciones llevadas a cabo por las autoridades rumanas entre 2005 y 2008 demostraron que no existen pruebas al respecto y recuerda que Rumanía "condena firmemente cualquier práctica de tortura".
El Gobierno rumano ha reaccionado así a un comentario publicado el lunes por Thomas Hammarberg, en el que asegura que el 23 de septiembre de 2003 se abrió junto a Bucarest un centro de detención clandestino de la CIA estadounidense.
Según Hammarberg, el centro de Rumanía fue abierto después del cierre del que la CIA tenía en Polonia, abierto en diciembre de 2002.
El comisario emplaza en sus comentario a los gobiernos de Rumanía, Polonia y Lituania a esclarecer si existieron centros de detención clandestina en sus territorios.
"Gobiernos europeos permitieron, protegieron y participaron en operaciones de la CIA en las que fueron violados principios fundamentales de los sistemas judiciales y de los derechos humanos", explicó Hammarberg, que criticó a las autoridades rumanas por no querer "esclarecer totalmente" lo que pasó en su territorio.
Desde la aparición de las primeras acusaciones en 2005, el Gobierno rumano ha negado constantemente las informaciones sobre este tipo de actividades en el país.
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