La inspectora de la Unidad de Familia y Mujer (Ufam) que no pensó que Sacramento Roca, la mujer asesinada por su expareja mientras estaba trabajando en noviembre de 2018, estuviera en situación de peligro en el momento que denunció que su expareja podría haberle pinchado las ruedas del coche, ha sido sancionada a la suspensión de empleo y suelo por un mes por el Régimen disciplinario del Cuerpo de la Policía.
Fuentes cercanas a la Policía han confirmado que la inspectora, que se encuentra trabajando en otra unidad, ha recibido la sanción de forma interna y disciplinaria.
El crimen ocurrió la tarde del 16 de noviembre de 2018 en una tienda de muebles de Palma, donde la mujer, de 36 años, se encontraba trabajando. Su expareja -un vigilante de seguridad de unos 45 años- la acuchilló varias veces en la línea de cajas del establecimiento, y después salió huyendo. Fue detenido en una calle cercana.
La mujer denunció cuatro días antes
La mujer había presentado una denuncia por daños cuatro días antes del crimen, al encontrar las ruedas de su coche pinchadas. La mujer atribuía estos hechos a su expareja y afirmó sentirse acosada. Además, la Policía Nacional abrió una información reservada tras detectar fallos en la tramitación de esta denuncia, y dos responsables de la Unidad de Familia y Menor (UFAM) --entre ellos la inspectora sancionada-- fueron apartados de la unidad.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios