Serbia olvida la crisis de la eurozona y cree que su candidatura a la UE traerá más empleo al país

El presidente serbio, Boris Tadic, se congratuló en un comunicado por las reformas para que su país sea una sociedad democrática, en la que se respetan los derechos humanos y de las minorías y se reafirman los valores europeos.

Tadic recalcó que el estatus de candidato trae a Serbia ante todo seguridad económica, como la garantía que supone ser un país seguro para las inversiones extranjeras.

"No se trata sólo de un proceso político y las integraciones. El estatus de candidato es una garantía de seguridad para compañías extranjeras, y con ella aumenta la posibilidad de crear nuevos puestos de trabajo", ha dicho el presidente.

"Es también una oportunidad para nuestros empresarios, empresas pequeñas y medianas, para nuestra agricultura que es nuestra gran baza en el mercado de la Unión Europea", ha agregado.

Realiza estas declaraciones justo un día después de que también se supiera que el paro en la eurozona tiene su peor dato histórico desde que se estableciera la moneda única.

Tadic consideró que a Serbia le espera un gran trabajo para iniciar las negociaciones de ingreso comunitario como un próximo paso en su camino hacia la UE.

No renuncia a Kosovo

También señaló que su política formulada como "Europa y Kosovo", sin renunciar a ninguno de los dos, ha aprobado su test europeo a pesar de grandes retos y obstáculos.

Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE concedieron anoche a Serbia el estatus oficial de país candidato a la adhesión, al considerar que Belgrado ha cumplido con todas las condiciones que se le habían planteado.

Estas han sido, ante todo, la entrega de todos los acusados de crímenes de guerra reclamados por la Justicia internacional, y los progresos en la normalización de la relación con Kosovo, su exprovincia que declaró en 2008 la independencia unilateral, pero que Serbia no reconoce.