Ciudad Real/Toledo (España), 12 ago.- El sacerdote español Antonio Rodríguez, detenido en El Salvador por colaborar supuestamente con pandilleros, se recupera en un hospital de los problemas de salud que tuvo en su reclusión preventiva, atendido por dos religiosos de su congregación, los Hermanos Pasionistas.
El padre Toño, como se le conoce en El Salvador, está "tranquilo y medicado" para controlar la hipertensión y la subida de azúcar que sufrió el pasado viernes como consecuencia de la situación que está viviendo y por lo que tuvo que ser ingresado, indicaron hoy a Efe fuentes del Ayuntamiento de Daimiel, localidad natal del religioso en el centro de España y donde vive su familia.
Estas mismas fuentes aseguraron que el alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, mantuvo ayer una conversación telefónica con el embajador de España en El Salvador, Enrique Ojeda, que, junto al cónsul, Fernando Villena, visitaron ayer al sacerdote, al que le han recomendado reposo absoluto.
El regidor afirmó que el cuerpo diplomático español desconoce que hoy se vaya a celebrar ninguna vista oral y agregó que sus abogados están pendientes de que se determine si hay o no delito y de si las acusaciones tienen fundamento, para presentar sus alegaciones.
Por su parte, el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha -región a la que pertenece el municipio-, Jesús Labrador, dijo hoy que el cónsul y el embajador, a través de las instrucciones que se están dando desde los ministerios de Justicia y Asuntos Exteriores, "están trabajando en la medida de lo posible para lograr el feliz desenlace de esa actuación".
La Fiscalía General de la República de El Salvador (FGR) acusa al religioso de los delitos de asociaciones ilícitas, tráfico de influencias e introducción de objetos prohibidos en centros penitenciarios, vinculados directamente con un cabecilla preso de la pandilla Mara 18, Carlos Mojica, alias "El Viejo Lin", y otros pandilleros.
El subdirector de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD), Abraham Ábrego, explicó que "dependerá de su condición de salud" que las autoridades judiciales decidan si Rodríguez, "en vez de estar recluido en la Investigación policial, esté en un hospital".
La FESPAD es una organización no gubernamental salvadoreña que lleva la defensa del religioso español, detenido el 29 de julio pasado.
La defensa sigue en espera del fallo escrito del Tribunal Especializado de Instrucción B de San Salvador, que el 5 de agosto dictó prisión provisional a Rodríguez, pero mediante una resolución verbal.
Por su parte, el presidente salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, pidió ayer transparencia en el proceso judicial contra el sacerdote español Antonio Rodríguez.
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