Suárez. Felipe gonzález dice que pactó con él discrepancias que no pusieran en peligro la transición

El expresidente del Gobierno Felipe González reveló hoy que pactó con su predecesor Adolfo Suárez "incluso las discrepancias para que no se fuera de las manos el proceso", y que sólo se opuso, como líder de la oposición, a lo que no ponía éste en peligro.
En una entrevista en la Ser recogida por Servimedia, González aseguró que su relación con Suárez fue "muy buena" salvo en el período que transcurrió entre mayo de 1980 y su dimisión, cuando el PSOE llegó a presentar una moción de censura que, desde su punto de vista, Suárez no "asimiló".
González manifestó la "profunda conmoción" y "tristeza" que le produce la muerte de Suárez, denunció que ha generado "mucho ruido que tapa alguna de las voces que había que oír de aquel momento" y rememoró una relación personal que, dijo, comenzó desde que el Rey le nombró presidente del Gobierno y él quiso sondear a la oposición.
Para González, "lo que se hizo fue extraordinariamente importante", aunque Suárez, "mucho más progresista que una parte de su grupo", no pudo llevar a cabo algunos de los proyectos que expresó en el "diálogo en corto", donde le reconoció que era "impresionante".
El exlíder del PSOE también alabó al Rey por haberse replegado y comportado como "rey constitucional" incluso antes de la Constitución, al haber confiado en Suárez el "ponerle letra a la música que él soñaba".
Aun defendiendo que la Constitución es "un buen fundamento", González se mostró favorable a "revisar la arquitectura constitucional", sin esperar a que "se degrade la crisis institucional y territorial" y que "nada se pueda recuperar".
Para ello, cree que "las resistencias no son tan grandes" como las que tuvo que afrontar Suárez, pero que, a diferencia de entonces, cuando había que seguir los pasos de las democracias avanzadas, ahora "no hay guión previo, tenemos que encontrar ese guión".