Syriza pierde poco a poco su ventaja frente a los conservadores de Samarás

Europa y buena parte del mundo mira con lupa todo cuanto ocurre en Grecia desde que el presidente Antonis Samarás convocara elecciones anticipadas para el próximo 25 de enero. El anuncio no fue sorpresivo, a finales de septiembre del año pasado, el 54% de los griegos pensaba que habría elecciones anticipadas en su país a principios de 2015. No se equivocaban. Aunque se supiera, existe una gran preocupación. Alemania se rescató a sí misma rescatando a Grecia; España observa atenta lo que ocurre al otro lado del Mediterráneo porque lo que allí suceda en unas semanas puede ser un anticipo del escenario que se vivirá en España a finales de 2015, con la pujanza de Podemos y Pablo Iglesias, espejo de la nueva izquierda griega.

Las encuestas siguen apuntando a una victoria de la coalición izquierdista Syriza, liderada por Alexis Tsipras, sin embargo la distancia con el segundo partido con más apoyos, los conservadores de Nueva Democracia, se acorta. La última encuesta publicada este domingo da a Tsipras una ventaja de 3,1% puntos sobre el actual partido en el Gobierno. Hace cinco meses, esa distancia era de once puntos. Las propuestas del joven Tsipras levantan recelos en algunos sectores de la sociedad que se preguntan de dónde sacará su país tanto dinero para pagar los empleos públicos y el aumento de las prestaciones sociales.

La población escucha las 'recomendaciones', advertencias o amenazas que vienen de Europa o el FMI, y que hacen crecer el miedo entre los griegos. La victoria de Syriza y algunas de sus medidas, como la quita de deuda pública, abriría la puerta para que Grecia saliera del Euro. Alemania no estaría preocupada por esta circunstancia. Desde Berlín, creen que la UE está ahora lo suficientemente fuerte como para afrontar este escenario.

El estudio publicado este domingo por el diario Eleftheos Typos ha sido realizado por Rass entre los días 29 y 30 de septiembre, justo después del anuncio de elecciones anticipadas. El sondeo otorga a Syriza el 30,4% de los votos frente al 27,3% de Nueva Democracia.

Sin embargo, pese a la victoria de Tsipras en los sondeos, el 74,2% de los griegos tiene claro que quiere seguir perteneciendo a la eurozona, frente al 24,1%.En Grecia no puede haber gran coalición

Si en España es difícil que se produzca una gran coalición entre los partidos tradicionales para impedir la llegada a la Moncloa de Podemos, lo es aún más en Grecia. El sistema electoral heleno otorga automáticamente 50 escaños extra al partido con mayor número de votos. De ganar Syriza, obtendría este 'plus' por lo que un pacto para desbancarles del Gobierno obligaría a Nueva Democracia a pactar con prácticamente el resto de formaciones, un abanico que incluye a comunistas y a Amanecer Dorado.

La tercera opción según todos los sondeos sería el partido comunista KKE con 4,8% seguido de los socialdemócratas To Potami (El Río) con un 4,7%. Los neonazis de Amanecer Dorado se harían con el 3,8%.

El histórico Pasok sigue en caída libre. El partido que forma coalición con los conservadores de Samarás quedaría relegado a la sexta fuerza del país con un raquítico 3,5%.

Otras encuestas anteriores, como la elaborada por la Universidad de Macedonia en Salónica, daba a Syriza la semana pasada una ventaja de un 4,5 % ante la conservadora Nueva Democracia (29,5 % frente a un 25 %). Amanecer Dorado se haría con un 6% según este sondeo. El cuarto puesto estaría disputado entre los comunistas de KKE y To Potami, con el 5 %.

Nuevamente esta encuesta profundiza en la caída de la izquierda tradicional del Pasok, con un 4 %. El umbral electoral para poder tener representación en la cámara parlamentaria helena es del 3%. También queda de manifiesto la bajada en apoyos de Amanecer Dorado, que no superaría el 6% mientras que en 2012 obtuvieron casi el 7%.

Hace apenas medio año, la distancia entre Syriza y Nueva Democracia era de once puntos. Fuera del Parlamento quedarían esta vez los nacionalistas Griegos Independientes y Dimar.El Pasok cerca de desaparecer

Los socialdemócratas de Pasok viven su peor momento electoral. Han actuado casi como un partido hegemónico en la vida política helena hasta 2012 y sin embargo ahora luchan por su supervivencia en el parlamento griego. Los datos de las dos encuestas citadas anteriormente no reflejan el impacto que tendría la salida del Pasok de su antiguo líder y presidente del Gobierno, Gorgios Papandreu.

Decir Papandreou en Grecia es casi lo mismo que decir Pasok. Su padre fue el fundador del partido, sin embargo el expresidente ha dejado de lado cualquier tipo de sentimentalismos familiares y amistosos para crear su propia formación: Movimiento para el Cambio.

Ningún sondeo refleja aún las opciones del Pasok tras su escisión, pero queda demostrado que Syriza y Tsipras han capitalizado todos los apoyos de la izquierda griega.