El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, aseguró este viernes que los mensajes SMS enviados por el director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, Jorge Moragas, para presionar a la expareja de Jordi Pujol Ferrusola a sacar a la luz los negocios de la familia no constituyen ningún tipo de delito pero sí podría haber una "violación de la intimidad" en su difusión.
En una entrevista a la Cadena Ser recogida por Servimedia, el fiscal general del Estado prefirió "ser prudente hasta que certifique la bondad de esa aparición de la invasión de la intimidad en una comunicación, que siempre me preocupa".
Torres-Dulce indicó que la comunicación de Moragas con Álvarez"no tiene trascendencia estrictamente penal", por lo que lo más que se puede hacer es extraer "valoraciones desde el punto de vista de valoraciones políticas".
"Lo que desearía es que no se mezclen más hechos de los que resultan especialmente derivados de las atuaciones estrictamente judiciales", añadió el fiscal general. "Las conversaciones con alguien que puede declarar algo en un proceso puede tener la relevancia que tiene y podrá tener una significación de tipo político".
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