Dos mujeres y un hombre

Tres muertos por arma de fuego en un piso de la calle Serrano 205 de Madrid

De hecho, varios vecinos han asegurado a este periódico que el hombre fallecido residía junto a su madre y una cuidadora en el piso, aunque la Policía no ha confirmado estos datos al estar investigando el suceso.

Tres muertos calle Serrano
Tres muertos por arma de fuego en un piso de la calle Serrano 205 de Madrid.
EFE

Tres personas han aparecido muertas por arma de fuego en una vivienda de la calle Serrano 205 en torno a las 10,20 de la mañana. La Policía Nacional acudió casi de inmediato tras las llamada de varios vecinos que oyeron los disparos, así como efectivos de Emergencias 112, que no pudieron reanimar a las víctimas. En la zona, además de agentes de la Policía Nacional, que han acordonado la zona, han acudido vehículos de la Policía Científica y de Summa112. Los fallecidos serían dos mujeres y un varón. Una de las mujeres tenía aproximadamente 70 años y el hombre, unos 50, mientras que la otra mujer era de entre 30 y 40 años.

La Policía Nacional de Madrid cree que fue el hombre hallado muerto junto a las dos mujeres quien mató a tiros a su esposa, luego a la amiga de esta y por último se suicidó con la misma pistola, han informado a Europa Press fuentes policiales. Esa es la principal hipótesis con la que trabaja el Grupo V de Homicidios de la Jefatura Superior de la Policía después de analizar los cuerpos, identificarlos, recabar los testimonios y antecedentes oportunos y de recomponer la escena del crimen en este piso correspondiente al 1ªC del número 205 de la calle Serrano de Madrid. 

El supuesto autor de los hechos habría matado a tiros a su pareja sentimental en la casa que ambos compartían. Se trata de una mujer española de 44 años y, de confirmarse, sería una nueva víctima mortal de violencia de género. En 2018 el individuo ya había sido detenido por violencia de género, aunque en la actualidad el caso no estaba activo ni había orden de alejamiento en vigor.

Una vecina consultada por La Información ha asegurado que en la mañana de este lunes había escuchado "jaleo" procedente de la casa. Asimismo, ha afirmado que el varón, al que habría estado llamando sin respuesta, tendría licencia de armas. Una de las hipótesis barajada es que el varón podría haber disparado a su madre y a una empleada del hogar, aunque se investigan otras posibles causas. De hecho, varios vecinos han asegurado a este periódico que el hombre residía junto a su madre y una cuidadora en un piso de la primera planta, aunque la Policía no ha confirmado estos datos al estar investigando el suceso.

Un vecino del edificio ha asegurado, por su parte, que no ha escuchado gritos esta pasada noche, mientras que otro inquilino de la finca de Serrano afirma que ha oído los disparos esta mañana, precisando que habría escuchado en otras ocasiones el sonido de tiros dentro de la casa, mientras que se ponía música en el patio común de la edificación.

Otro residente dice que escuchó ruidos a la 1 de la mañana y confirma que se oía con frecuencia en el patio interior cómo el varón disparaba con una escopeta de perdigones, por lo que hubo quejas en el edificio.

El equipo médico desplazado a la zona ha encontrado los tres cadáveres en una vivienda de la primera planta del número 205 de la conocida como Milla de Oro de Madrid, en la que se encuentran algunas de las marcas de mayor lujo que operan en España.

Los cuerpos de las dos mujeres y el hombre no fueron hallados juntos dentro del inmueble, por lo que las pesquisas se centran, entre otros aspectos, en conocer en qué circunstancias se produjeron los disparos por arma de fuego. La Información no ha podido saber la nacionalidad de los fallecidos ni las características del arma utilizada.

El perímetro del edificio, construido en 1971 y en el que viven 24 familias, fue acordonado por la Policía casi desde el primer momento de conocerse el suceso. El Grupo V de Homicidios se encarga de la investigación de los hechos y al lugar se desplazaron agentes de la Policía Científica para recabar pruebas.

Los trabajadores de dos comercios cercanos al edificio, una papelería y una tienda de ropa profesional, seguían a media mañana sorprendidos ante semejante suceso a la espera de conocer la identidad de las víctimas para saber sin eran clientes habituales. Aseguraban estar sorprendidos del dispositivo policial puesto marcha desde que se alertara a la Policía pasadas las 10 de mañana.

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