Pueden decir que les han salvado la vida. Entre el 17 de julio y el 17 de agosto, 18.296 inmigrantes (5.276 sólo en la semana del 10 al 17 de agosto), fueron socorridos por los guardacostas turcos, según ha desvelado el gobierno en un comunicado.
Desde comienzos de este año, 36.511 migrantes han sido auxiliados en el mar Egeo, por lo que la cifra de salvados en este último mes alcanza a más de la mitad del total en lo que va de todo el año.
El gobierno advierte, además, "un aumento significativo del número de migrantes irregulares (...) desde el comienzo del verano boreal", que intentan llegar a Grecia desde Turquía, en particular desde la ciudad turística de Bodrum a la isla griega de Kos.
A pesar de las condiciones climáticas favorables en este periodo estival, la travesía se revela peligrosa para los refugiados que recurren a embarcaciones muy precarias.
"En la mayoría de los casos, los migrantes en situación irregular se embarcan en vetustas barcazas que naufragan en el mar", precisa el comunicado.
Según las autoridades turcas, felicitando a sus servicios guardacostas, la tasa de mortalidad entre los refugiados ha descendido mucho respecto a 2014, y se ubica por debajo de la media de otros países que enfrentan situaciones similares.
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