Turquía se sume aún más en la violencia con 12 policías muertos en ataque del PKK

  • Turquía se hundió este martes un poco más en la violencia con un nuevo ataque atribuido al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) que dejó 12 policías muertos, y una serie de bombardeos turcos contra bases rebeldes en Irak.

Este atentado se produjo dos días después de que los rebeldes kurdos del PKK mataran a 16 soldados turcos en el sureste del país.

Una bomba estalló el martes por la mañana al paso de un vehículo de la policía cuando circulaba en la región de Aralik, en los confines de las fronteras de Turquía con Azerbaiyán, Armenia e Irán, explicaron a la AFP fuentes de los servicios de seguridad.

Al menos 12 soldados resultaron muertos, según la agencia gubernamental Anatolia.

El domingo, el PKK mató a 16 soldados turcos en la región montañosa de Daglica, cerca de la frontera iraquí, en el ataque más sangriento desde que se reanudaron los enfrentamientos entre el ejército y los rebeldes kurdos, a fines de julio.

En represalia, más de 50 cazas turcos bombardearon masivamente durante seis horas la madrugada del martes unos 20 objetivos del PKK en el norte de Irak, matando a "entre 35 y 40 terroristas", según Anatolia.

El primer ministro islamo-conservador turco Ahmet Davutoglu había prometido el lunes erradicar el PKK.

"¡Pase lo que pase, hay que limpiar esas montañas de estos terroristas!", tronó Davutoglu ante la prensa.

Esta escalada hace añicos las conversaciones de paz iniciadas en 2012 para poner fin a un conflicto entre el Estado turco y los rebeldes kurdos que dejó unos 40.000 muertos desde 1984.

Davutoglu asiste este martes a una ceremonia militar en Van (este) en honor de los "mártires" --según la terminología oficial turca-- muertos el domingo.

A fines de julio, el gobierno turco ordenó una serie de bombardeos aéreos contra las bases de los rebeldes kurdos en el norte de Irak, en represalia a ataques rebeldes contra sus fuerzas de seguridad.

Según un último balance de la prensa progubernamental, estos enfrentamientos han causado la muerte de un centenar de soldados o policías y de un millar de rebeldes.

Los últimos ataques del PKK han provocado tensiones entre los turcos y la comunidad kurda del país en varias ciudades. Cerca del 20% de los 76 millones de turcos son de origen kurdo y viven esencialmente en el sudeste del país.

En Beypazari, en las afueras de Ankara, decenas de nacionalistas turcos atacaron a pedradas a un grupo de obreros kurdos e incendiaron automóviles, según la agencia de prensa Dogan, que dijo que hubo siete heridos, entre ellos dos policías.

Locales del principal partido prokurdo, (HDP, Partido de la Democracia de los Pueblos) han sufrido ataques similares en varias ciudades.

El líder de esta formación, Selahattin Demirtas, lanzó un vibrante llamado a la calma. "Kurdos, turcos, acérquense unos a otros. La paz es la mejor medicina", dijo ante la prensa.

"Semejantes actos sólo sirven a los intereses del PKK, hay que evitarlos" dijo en su cuenta Twitter Huseyin Celik, un responsable del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), en el poder desde 2002.

Esa escalada preocupa cuando faltan menos de dos meses para las elecciones legislativas anticipadas convocadas por el presidente Recep Tayyip Erdogan para el 1 de noviembre.

En los pasados comicios del 7 de junio, el AKP perdió la mayoría absoluta que tenía en los últimos 12 años en el parlamento. El jefe de Estado espera que su partido la recupere en noviembre para instaurar un régimen presidencialista fuerte.

El lunes la oposición acusó a Erdogan de avivar el conflicto kurdo para facilitar sus ambiciones políticas.

ba-pa/me/app

Mostrar comentarios