Un clérigo chií, condenado a muerte en Riad por pedir un cambio de régimen

Riad, 15 oct.- Un tribunal saudí condenó hoy a muerte a un destacado clérigo opositor chií por pedir la instauración de un régimen teocrático de esa rama del islam en Arabia Saudí y Baréin e instigar a manifestaciones.

Según la agencia de noticias saudí, Spa, la Corte Penal de Riad sentenció al clérigo Namr al Namr, de 55 años, a la pena capital también por insultar a las autoridades del Estado saudí y a los discípulos del profeta Mahoma.

El religioso, que es también activista defensor de los derechos de la minoría chií, fue detenido en la provincia oriental de Al Qatif en julio del año pasado.

Resultó herido en una pierna al resistirse a su arresto, que se produjo en el marco de los disturbios y protestas registrados en esas fechas en Al Qatif, de mayoría chií.

Al Namr pidió en sus sermones de los rezos del viernes la instauración del régimen "wilayat al faqih", aplicado en Irán, y que estipula que un clérigo destacado chií gobierne el país hasta que retorne el "imán ausente". En el caso iraní, el que lo representa es el líder supremo iraní, el ayatolá Ali Jamenei.

El "imán ausente" es el último de los doce imanes del credo chií, Mohamed Ibn Hasan al Askari, que, según la creencia de este dogma, desapareció en un cueva de Irak, y que algún día retornará para redimir al mundo.

El pasado mayo, un tribunal de la ciudad de Yeda (oeste) condenó a muerte a una persona por causar disturbios y atacar a las fuerzas de seguridad en Al Qatif.

Un día antes, el tribunal condenó a la horca a un hombre por disparar contra la policía en Al Qatif, proporcionar artefactos explosivos a terceros, colaborar con otros que instigaban a la violencia y poseer armas, entre otros delitos.

Al Qatif fue escenario durante 2012 de protestas y enfrentamientos que causaron la muerte y heridas a civiles y policías.

Las áreas de mayoría chií del país denuncian la marginación legal que sufren, ya que los chiíes no pueden ingresar en el Ejército o trabajar para los ministerios de Interior o Asuntos Exteriores, entre otras limitaciones.