Zaragoza, 24 may.- José Manuel Bandrés, magistrado del Tribunal Supremo, ha asegurado hoy que la denuncia presentada contra el presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Dívar, desde un punto de vista penal "posiblemente" esté cerrada, pero ha considerado necesaria una explicación.
Así lo ha dicho a los periodistas antes de tomar parte en la presentación pública, en la sede del Justicia de Aragón, en Zaragoza, de un libro propio de ensayos sobre democracia, justicia y derechos humanos.
En su opinión, el archivo de la fiscalía de la denuncia contra Dívar puede suponer el cierre definitivo del caso a nivel penal, aunque ha señalado que desde el punto de vista del compromiso ético, las personas que presiden altas instituciones deben explicar a la sociedad la necesidad de determinados comportamientos.
A su juicio, "es importante que si hay prácticas que puedan ser tachadas por la opinión pública de no perfectamente incardinables en comportamientos éticos, pedir disculpas y poner en marcha los instrumentos necesarios para que esas conductas no se vuelvan a repetir".
En relación a Dívar, el magistrado ha asegurado que él mismo debe valorar personalmente la decisión a adoptar, teniendo en cuenta que "el comportamiento de los jueces en España, desde el punto de vista de la ética y de la integridad personal, es intachable".
"Si ha habido algún tipo de dificultad en la comprensión respecto a algún determinado pago, creo que es importante una explicación ante la opinión pública para que pueda comprender que el comportamiento ha sido ético".
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