Un pasillo para las especies del tamaño de un país

 El planeta pierde diversidad biológica, sobre todo, por el impacto del desarrollo humano. El progreso se ha traducido en cientos de infraestructuras- carreteras, embalses, presas- que han fragmentado el territorio, acotando el espacio a especies animales y vegetales. La campaña Plantemos para el Planeta, auspiciada por Naciones Unidas, quiere devolver parte de ese espacio original a la biodiversidad, a través del proyecto Ardilla, una iniciativa que pretende crear un corredor de bosques a escala nacional, pionero en Europa. “Una de las causas más importantes de la pérdida de biodiversidad es que las especies no encuentren cómo desarrollarse a causa de la fragmentación del territorio, es como si vivieran en islas, no entran nuevos individuos y no pueden migrar”, explica José Lindo, director del proyecto.

Conectar los bosques de toda España a través de un corredor ecológico limaría además el impacto del cambio climático, que está acentuando el frenazo en la migración de especies. Lindo pone como ejemplo los bosques de alcornocales. “Al aumentar las temperaturas, dejarán de migrar hacia otros territorios, impidiendo la adaptación de especies”, añade. La iniciativa ha utilizado para dar notoriedad al proyecto, la anécdota de la ardilla a la que recurría Félix Rodríguez de la Fuente, por la que, antaño, la continuidad de los bosques españoles era tal, que una ardilla podía recorrerlos de costa a costa sin necesidad de tocar el suelo.

La idea no es sólo plantar árboles, sino estudiar la estructura de los diferentes ecosistemas para facilitar el tránsito de especies. “Eso incluye recorridos fluviales, senderos o caminos, no es plantar por plantar”, explican desde la organización. Ya se han firmado acuerdos con diferentes comunidades autónomas, aunque tras las elecciones y el cambio en los gobiernos regionales, la organización está atando de nuevo esos convenios con los diferentes ejecutivos. Andalucía fue la primera en firmar, y su administración “ya está estudiando la forma de conectarse con Murcia y con Castilla la Mancha”, añade Lindo. La idea es que sean las empresas las que sufraguen gran parte de la factura. Porque es en el entorno privado donde está el dinero, y porque Ardilla quiere así fomentar la responsabilidad social corporativa. A largo plazo, Plantemos para el Planeta quiere extender la iniciativa por otros países de Europa.