Una delegación iraní viajará a Yemen por diplomático secuestrado

Teherán, 20 ago.- Una delegación iraní viajará a Yemen para seguir el caso del secuestro del funcionario de la embajada de Irán que ocurrió el pasado 21 de julio en Saná, informó hoy en rueda de prensa el portavoz del ministerio iraní de Asuntos Exteriores, Seyed Abas Araqchi.

"Ya se han emitido los visados para la delegación iraní y muy pronto partirá a Yemen", dijo Araqchi, quien no concretó la fecha del viaje pero aseguró que Irán desconoce el paradero del diplomático iraní.

"No tenemos nuevas noticias sobre los secuestradores y tampoco sobre el sitio donde mantienen retenido al señor Nikbajt en Yemen", aseguró el portavoz de la cancillería iraní.

El diplomático iraní Nur Ahmad Nikbajt desapareció el pasado 21 de julio cuando se dirigía desde su casa a la sede de la embajada en Saná y, poco después, el encargado de negocios de la legación iraní en Yemen, Morteza Abedi, confirmó su secuestro por unos hombres armados en plena calle.

Desde esa fecha, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán convocó al menos dos veces al encargado de negocios de Yemen para expresarle su preocupación por el caso.

Irán y Yemen mantienen unas complicadas relaciones desde hace años, ya que las autoridades de Saná acusan a Teherán de apoyar a los rebeldes chiíes (llamados "hutíes"), que controlan actualmente la provincia septentrional de Saada, fronteriza con Arabia Saudí.

Según el Gobierno yemení, Teherán brinda también apoyo al movimiento separatista del sur del Yemen que lleva a cabo desde 2007 manifestaciones violentas y ataques contra las fuerzas policiales y militares para pedir la independencia de esa zona.

En octubre de 2012 las fuerzas de seguridad yemeníes aseguraron que habían desarticulado una red de espionaje iraní que supuestamente operaba allí introduciendo armamento para desestabilizar el país.

En Yemen son frecuentes los secuestros de ciudadanos extranjeros por tribus como forma de presión a las autoridades para que respondan a sus demandas, como la liberación de miembros de sus clanes encarcelados.

A los secuestros perpetrados por grupos tribales se suma la acción de Al Qaeda, implantada en el sur del país.