Varios presos exponen su arte en los juzgados y ya libres se buscan la vida creando

Málaga.- Bajo el título "Arte sin etiquetas", el Colectivo Moraga, formado por presos de la cárcel de Alhaurín de la Torre (Málaga), han presentado hoy una serie de obras, que se exponen en un espacio muy peculiar, la Ciudad de la Justicia, y que ayudan a algunos, una vez en libertad, a ganarse la vida.

Pintura, escultura, poesía, obras gráficas e hilo conforman la muestra de más de cuarenta piezas elaboradas por los miembros de este colectivo, que comenzó su andadura en 1996 en el centro penitenciario malagueño capitaneado por su coordinador y creador, Rafael Fernández Pacheco.

En palabras de Fernández Pacheco, el trabajo que desarrolla el Colectivo Moraga "trata de acercarse a la persona como individuo, fomentando las potencialidades positivas" a través de la expresión plástica.

La secretaria general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, ha explicado durante la inauguración de la muestra que las estas creaciones "pueden ser equiparables a las que se representan en cualquier otra exposición" y, sobre todo, de una "altísima calidad humana".

"Estamos en la Ciudad de la Justicia y esto tiene un sentido muy profundo para nosotros", ha dicho la secretaria, que ha matizado que la justicia "son las leyes, la sanción para quien incumple éstas, pero también son valores".

"Creemos en esos valores -ha dicho- en el valor del trabajo para la reinserción, y para devolver a la sociedad a mejores personas de las que recibimos cuando ingresan, ésa es la esencia de nuestro trabajo".

Gallizo ha calificado la importancia de la educación en las prisiones como un elemento "fundamental", y la ha equiparado con el trabajo o la lucha contra la droga, y ha destacado que la cultura, en las cárceles, "no es únicamente pasar el rato", sino que es un espacio de "transmisión de valores".

"Afortunadamente los miembros del colectivo van cambiando porque hay personas que salen en libertad y otras que se incorporan pero el colectivo", ha explicado Gallizo, se mantiene por "el entusiasmo y por el empuje" de su creador, Rafael, "el alma de esta experiencia".

Que cada persona encuentre lo mejor de sí mismo para construir una vida diferente es la esencia del trabajo de estos artistas, que mediante este proceso de creación pueden encontrar, según la secretaria general, respuesta para algunos de los problemas que tienen al entrar en prisión.

"Uno cuando entra es porque ha cometido un delito pero normalmente su vida viene acompañada de muchas carencias, angustia, soledad, que a veces se traduce en agresividad y en conductas que no son buenas para la convivencia", ha precisado Gallizo.

"Es muy importante que la sociedad acoja con generosidad e inteligencia a la persona que ha cometido un error y que ha pagado por él -ha dicho- pero que puede volver a integrarse si no le ponemos etiquetas y si esa fase de su vida no se convierte en un destino que le va a acompañar siempre".

Por su parte, el viceconsejero de Gobernación y Justicia, Juan Jesús Jiménez Martín, ha destacado que la exposición es una manera de "humanizar" la administración de Justicia para que no sea solo "seria, penalizadora, castigadora" sino "un servicio público".

"Me gustaría abrir este espacio a otras futuras experiencias para que de alguna forma acerquemos la administración de Justicia, a través del uso de sus instalaciones, al conjunto de la sociedad", ha concluido Jiménez.