Yair Lapid podría ser el próximo ministro israelí de Exteriores

Jerusalén, 24 ene.- El líder de la segunda fuerza política en Israel tras las elecciones del pasado martes, Yair Lapid, podría ser el próximo ministro de Exteriores, informan hoy medios locales.

"El Ministerio de Exteriores no está legalmente registrado a mi nombre", ironizó hoy el exministro Avigdor Lieberman, que recordó a la radio militar israelí su intención de recuperar el puesto del que dimitió hace un mes al ser imputado por fraude y abuso de confianza.

Fuentes del Likud citadas hoy por la radio pública israelí reconocieron que Lapid recibirá la cartera que prefiera de entre las de Exteriores y Finanzas a cambio del apoyo de sus 19 diputados, la gran sorpresa de los comicios.

Lieberman, número dos de la candidatura Likud Beitenu del primer ministro Benjamín Netanyahu, había declarado ayer sobre la cartera que obtendría Lapid a cambio de su previsible entrada en el Gobierno que lo "natural" era que fuese la de Finanzas.

Lapid desactivó ayer la propuesta de la líder laborista Shely Yajimovich de cambiar al primer ministro aprovechando el empate a 60 diputados entre el bloque de derechas y partidos ultraortodoxos y el que engloba a las formaciones de centro, izquierda y árabes, y dijo que no usaría su fuerza parlamentaria para sustituir a Netanyahu.

Mientras se negocian las coaliciones, los medios especulan con un Gobierno sin partidos ultraortodoxos formado al menos por Likud Beitenu, el partido de Lapid (Yesh Atid) y la ultraderechista Habait Hayehudí, que sumarían 61 diputados.

No obstante, un diputado de Likud señaló a la edición de hoy del diario "Maariv" que la formación ultraortodoxa sefardí Shas, con 11 escaños, "entrará a cualquier precio" en el próximo Ejecutivo de coalición.

El cómputo definitivo del voto, que se conocerá hoy tras contarse los 240.000 de soldados, presos, diplomáticos y hospitalizados, apunta un cambio de escaño.

Tras el recuento de un 70% de las denominadas "papeletas azules", la ultraderechista Habait Hayehudí obtendría un diputado más y llegaría a 12, mientras que el partido árabe Lista Árabe Unida-Taal perdería uno y se quedaría en cuatro.

También mantendría sus dos diputados del Kadima, al superar por muy poco el 2% mínimo necesario para tener presencia parlamentaria.