Zapatero atacará al déficit con menos inversiones y menos gasto en Educación y Sanidad

  • El presidente del Gobierno comparece hoy ante el Congreso de los Diputados para explicar su plan para acelerar la reducción del déficit entre 2010 y 2011. El Ministerio de Fomento y las Comunidades Autónomas serán las principales 'víctimas' de las medidas que presentará en la Cámara Baja, con Educación y Sanidad como principales víctimas del ahorro.
B.Toribio / R.Ugalde

El presidente del Gobierno detallará hoy en el Congreso cómo piensa adelantar a 2010 y 2011 el grueso del objetivo de reducción del déficit y recortarlo en 15.000 millones más de lo previsto inicialmente para que en 2013 España cumpla con la exigencia de Bruselas de situarlo en el 3%.

Se trata de recortar en 1,5 puntos porcentuales de déficit público (0,5 este año y el 1 restante el que viene) que dejará varias ‘víctimas’ por el camino. La primera, buena parte del capítulo de inversiones previstas por el Ministerio de Fomento. Y la segunda, las Comunidades Autónomas que tendrán que apretarse el cinturón en buena parte de las competencias transferidas, especialmente en Educación y Sanidad.

En concreto, el Gobierno está negociando con las Autonomías un recorte sanitario que pasaría por una gestión más racional de los hospitales, de manera que las especialidades menos demandas sólo se encuentren en los núcleos de población mayores, en vez de intentar que cada centro cuente con toda la gama. Sin embargo, esta propuesta ha levantado muchas ampollas y todavía está en el aire que pueda llevarse a cabo, según ha confirmado lainformacion.com.

¿Nuevas medidas o medidas ya previstas?

Fuentes gubernamentales explican que lo que explicará Zapatero hoy no es un nuevo plan, sino que consiste en adelantar a 2010 y 2011 el grueso del objetivo de reducción del déficit para lograr el objetivo del 3% de aquí a tres años. Por ello, añaden, el grueso de las medidas que detallará hoy el presidente del Gobierno están ya contempladas en el Plan de Austeridad remitido a Bruselas hace unos meses.Este plan se basa en cuatro pilares: menos gasto en personal público, menos transferencias, menos inversiones y menos subvenciones.

El problema es que el plan de reducción del déficit cuenta con unas previsiones de crecimiento muy superiores a las estimadas por el resto de organismos internacionales. De ahí que no se puedan descartar nuevos recortes, adicionales a los ya anunciados, tanto en la comparecencia de hoy como en el futuro, ya que la base de ingresos puede ser muy inferior a las dibujadas por el Gobierno. Por ejemplo, el FMI prevé que la economía española crezca un 0,9% en 2011, frente al 1,8% pronosticado por el Ejecutivo.

Fue el propio Zapatero quien anunció el viernes en Bruselas que el Ejecutivo español aceleraría el plan previsto para reducir el déficit. De hecho, dijo que haría público este plan en la comparecencia de hoy en el Congreso, pero al final la vicepresidenta Elena Salgado la comunicó primero a sus colegas europeos para así calmar las voces que desde Bruselas piden a España más concrección y más reformas.

Pero en su comparecencia de hoy, el presidente tendrá que ocuparse de otros dos asuntos:

Ataques especulativos .Aunque tratará de poner el acento en la buena acogida que ha tenido el fondo de rescate acordado este fin de semana en el Ecofin, con subidas históricas en el Ibex y otros parqués europeos, a nadie se le ha olvidado el batacazo que la semana pasada sufrió la Bolsa, que perdió casi un 14% en la peor semana desde octubre de 2008.Zapatero tendrá que dar explicaciones sobre cómo un falso rumor sobre una petición de ayuda a España al FMI y a cómo hacer frente a los temores de los inversores a que en España suceda lo mismo que en Grecia.

El nuevo fondo de rescate de la UE. El motivo oficial de la comparecencia de hoy, que Zapatero ha realizado a petición propia, es informar al Congreso de la última reunión de jefes de Estado y de Gobierno del Eurogrupo, celebrada el viernes, a la que siguió la reunión del Ecofin el domingo. Este fin de semana la UE logró diseñar un fondo de rescate sin precedentes por el que se movilizarán más de 700.000 millones de euros en préstamos y avales para aquellos Estados que sufran una situación similar a la del caso griego.

El presidente del Gobierno debería explicar qué parte de los 440.000 millones de euros que aportarán los Estados a este fondo – que alimentan los países miembros del la UE junto con la Comisión Europea (60.000 millones) y el FMI (220.000)- correrá a cargo de España y qué implicaciones supondría poner en marcha este fondo para el ya de por sí elevado endeudamiento de nuestra economía.

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