De la Calle achaca a intereses electoralistas la polémica por el amianto en los colegios

La consejera de Educación, Adelaida de la Calle, ha dejado claro que desde la Junta "se vela siempre por la seguridad de nuestros niños", en relación con la eliminación exigida por padres andaluces del amianto en los colegios. Así, ha considerado que no hay fundamento para crear una alarma al respecto y ha opinado también que "estamos en periodo electoral y hay que sacar algún tema".

"Es la tónica general en elecciones de buscar algo más llamativo", ha declarado a los periodistas De la Calle, que este viernes ha visitado el Instituto de Educación Secundaria (IES) Guadalmedina de Málaga.

Ha incidido en que hay "un montón de estructuras en la ciudad ligadas al amianto", pero "éste es peligroso siempre que haya una rotura", añadiendo, al respecto, que "es un material extremadamente duro". Además, aunque ha recordado que "no hay nada reglamentado para quitarlo, se va retirando progresivamente".

En consecuencia, la titular andaluza de Educación ha lanzado un mensaje de "tranquilidad absoluta" a los padres de los alumnos: "cuando se detecta que existe una rotura, se toman las medidas adecuadas; los protocolos están bien descritos".

INSPECCIONES CONSTANTES

De hecho, ha asegurado que se realizan "inspecciones constantes" para detectar posibles problemas. Más aún, ha reiterado que "estamos constantemente revisando todas aquellas estructuras que tienen amianto".

Eso sí, De la Calle ha precisado que se tiene que actuar cuando "los niños desaparezcan, en época de verano, porque cambiar la estructura es complejo y sólo hay unas empresas especializadas".

Recientemente, fue rechazada en la Comisión de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Parlamento andaluz, con los votos del PSOE y de Ciudadanos, una Proposición No de Ley (PNL) presentada por Podemos, que se hacía así eco de las protestas de las Asociaciones de Padres y Madres (AMPA), pidiendo a la Junta un inventario del amianto en los colegios y un calendario para su retirada.