La erupción de un volcán en el sur de Islandia durante la madrugada del domingo obligó a cientos de personas a evacuar la zona y a desviar algunos vuelos, después de que las autoridades declararan un estado de emergencia, según comunicaron responsables.
La intensa actividad volcánica comenzó poco antes de la medianoche, cuando el glaciar Eyjafjallajokull, el quinto más grande de la isla, empezó a soltar humo y lava desde varios cráteres a lo largo de una grieta muy popular entre los turistas.
La policía declaró el estado de emergencia y envió equipos de rescate para evacuar cerca de 500 personas que viven en una zona sin apenas población cerca del lugar de erupción, pero no se ha comunicado la existencia de heridos o de daños privados.
Se han abierto tres centros de atención de la Cruz Roja cerca de las aldeas afectadas para poder asistir a la población evacuada.
"Las evacuaciones se realizaron tranquilamente", dijo el jefe de policía local Kjartan Thorkelsson, añadiendo que no había señales de que el volcán representara algún peligro inmediato para la población.
El volcán escupió lava y lanzó una columna de humo de un kilómetro de altura aproximadamente, pero hay bajo riesgo de inundaciones, a menos que la erupción aumentase en alcance y derritiese grandes cantidades de hielo del glaciar, dijo la policía.
Los vuelos internacionales fueron desviados de la isla y otros viajes han sido cancelados debido al riesgo de que las nubes de humo y ceniza interfieran en el sistema de navegación de los aviones, señalaron.
Algunos científicos en Islandia han estado siguiendo el glaciar Eyjafjallajokull, inactivo desde 1921, buscando signos de actividad sísmica, pero habían señalado que había pocas posibilidades de que el volcán entrase en erupción el fin de semana.
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