El Gobierno brasileño vigilará posibles abusos en los precios en el Mundial

  • El Gobierno brasileño anunció hoy que ha decidido crear un grupo interministerial que se ocupará de hacer un seguimiento a los precios de pasajes aéreos, hoteles y restaurantes, a fin de impedir abusos durante el Mundial de fútbol de 2014.

Brasilia, 17 oct.- El Gobierno brasileño anunció hoy que ha decidido crear un grupo interministerial que se ocupará de hacer un seguimiento a los precios de pasajes aéreos, hoteles y restaurantes, a fin de impedir abusos durante el Mundial de fútbol de 2014.

"No estableceremos precios, pero no permitiremos que haya ningún abuso", pues eso será "esencial para la imagen del país", declaró a los periodistas la ministra de la Presidencia, Gleisi Hoffmann, quien coordinará el trabajo de ese grupo.

La decisión fue tomada por la presidenta Dilma Rousseff después de que la prensa denunciara que los precios de los pasajes aéreos entre las ciudades de Río de Janeiro y Sao Paulo, dos de las doce subsedes del Mundial, ya se han multiplicado hasta diez veces para los días en que se celebrará la gran cita del fútbol.

Un estudio divulgado poco antes por la estatal de fomento al turismo Embratur también mostraba que las tasas cobradas por los hoteles para el Mundial 2014 se sitúan, en algunos casos, hasta un 583 % por encima de las que se pedían en el mismo periodo de este año.

El Mundial comenzará en Sao Paulo el próximo 12 de junio y la final se disputará el 13 de julio en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.

En el grupo interministerial coordinado por Hoffmann estarán también los responsables de los ministerios de Deporte, Justicia, Hacienda y Salud, así como la Secretaría de Aviación Civil.

La intención es poner coto con antelación a prácticas especulativas como las ya denunciados por la prensa y a otras similares que hubo en Brasil durante algunos grandes eventos.

El año pasado, en vísperas de la Conferencia de la ONU sobre el Desarrollo Sostenible Río+20, que se celebró en Río de Janeiro, varias delegaciones extranjeras amenazaron con no acudir por los precios abusivos de los hoteles.

La situación finalmente se resolvió y los precios volvieron a sus niveles habituales, pero el problema se repitió en julio pasado con motivo de la visita del papa Francisco, que acudió a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), celebrada en Río de Janeiro.

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