Al 1,25%

El Banco de Inglaterra sube los tipos por quinta reunión seguida por la inflación

El banco central endurece de nuevo su política para contener la inflación, cuya proyección se sitúa en el 10% para este año, aunque se espera que baje al objetivo del 2% en 2024.

Andrew Bailey, gobernador del Banco de Inglaterra, junto a la Reina Isabel II.
Andrew Bailey, gobernador del Banco de Inglaterra, junto a la Reina Isabel II.
DPA vía Europa Press

El Banco de Inglaterra implementó el jueves un quinto aumento consecutivo de los tipos de interés para el área libra, ya que busca frenar la inflación galopante que vive la economía británica. En esa ocasión, la autoridad monetaria que dirige Andrew Bailey ha elevado la referencia en 25 puntos básicos, del 1% al 1,25%, conforme a las previsiones de los analistas, y el nivel más alto del precio del dinero en ese país desde 2009.

En su reunión que finalizó el 15 de junio de 2022, pero se anuncia este jueves, el comité de política monetaria votó por una mayoría de 6 a 3 para aumentar la tasa bancaria en 0,25 puntos porcentuales. La minoría prefería aumentar los tipos en 0,5 puntos porcentuales, hasta el 1,5%. "El Comité de Política Monetaria (MPC) del Banco de Inglaterra establece la política monetaria para alcanzar el objetivo de inflación del 2% y de una manera que ayude a sostener el crecimiento y el empleo", alega el banco.

Según sus proyecciones de mayo, el crecimiento del PIB del Reino Unido se desaceleró bruscamente durante la primera mitad del período de pronóstico y, aunque se esperaba que el mercado laboral se ajustara un poco más en el corto plazo, se proyectó que la tasa de paro aumente al 5,5% en tres años.  Se esperaba que la inflación promediara un poco más del 10% en su punto máximo en el cuarto trimestre de 2022. 

"Condicionado a la trayectoria ascendente implícita en el mercado para la tasa bancaria en ese momento y el pronóstico del comité para los precios de la energía, se proyectó que la inflación caería un poco por encima del objetivo del 2% en dos años, reflejando en gran medida la disminución de la influencia de factores externos, y estar muy por debajo de la meta en tres años, principalmente como reflejo de demanda interna más débil", apunta.

La economía británica se contrajo inesperadamente un 0,3% en abril después de una contracción del 0,1% en marzo, las primeras caídas consecutivas desde abril y marzo de 2020, y la OCDE ha pronosticado que el Reino Unido será la economía más débil del G-7 el próximo año

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