Sobre los 70 dólares

El petróleo sufre su primera caída anual desde 2020 pese a los esfuerzos de la OPEP

La cotización del 'oro negro' registra caídas que rondan el 10% y rompe con dos años de subidas en pleno debate acerca de si la alianza que agrupa a los principales productores ha perdido capacidad para equilibrar el mercado. 

Plataformas de petróleo
El petróleo sufre su primera caída anual desde 2020 pese a los esfuerzos de la OPEP. 
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El petróleo deja atrás un año algo peor de lo esperado para la OPEP. Los esfuerzos de esta organización por reducir la oferta no han dado los frutos esperados y la cotización del 'oro negro' no escapa de las pérdidas. Tanto los futuros del Brent como el West Texas registran caídas en comparativa anual y sufren el que ha sido su peor año desde 2020, condicionado por la pandemia. El descenso en ambos casos ronda el 10% con el crudo de referencia en el Viejo Continente sobre los 77 dólares, mientras el WTI resiste sobre los 71 dólares el barril después de un 2021 y un 2022 de ascensos. 

Ni la guerra entre Israel y Hamás ni los recortes de producción establecidos por la alianza han conseguido animar los precios en un ejercicio caracterizado por el aumento de la oferta fuera de la organización, que cuenta con un miembro menos desde que Angola anunciara la semana pasada su salida de la OPEP con motivo del rechazo de la cuota de bombeo que se le había asignado. A esto se suman otros factores como el inventario de Estados Unidos con las reservas de almacenamiento de Oklahoma en máximos desde el pasado mes de agosto, una extracción que ha batido récords en el país estadounidense y la amenaza de un freno económico que pueda contraer la demanda. 

"Muchos especuladores y operadores han resultado gravemente perjudicados este año porque el comercio no ha sido fácil, ha sido muy volátil", ha señalado la cofundadora y directora de investigación de Energy Aspects, Amrita Sen, en una entrevista con 'Bloomberg Television', para destacar la necesidad de ejecutar "reducciones sostenidas de existencias". Sin olvidar la tensión en el Mar Rojo después de los ataques a buques por parte de los rebeldes hutíes en Yemen, que ha forzado a que la mitad de la flota mundial de los buques que transita por esta vía ahora está evitando la ruta, también los petroleros, alargando los viajes. 

"Dado que las tensiones en Gaza (de momento) no se están extendiendo y no tienen un efecto directo en la producción de petróleo, los precios del crudo están experimentando una tendencia a la baja. La debilidad general del petróleo también se refleja en el desplome de los márgenes mundiales de las refinerías y en el aplanamiento de las curvas de futuros, de muy atrasadas a ligeramente contagiosas en cuestión de cuatro semanas", destaca el director de materias primas de Vontobel, Michael Salden. El experto hace énfasis en el que el mercado "sigue dando señales de que sobra petróleo" a la par que pone en valor la desaparición de la prima de riesgo geopolítico. 

En pleno debate sobre el papel de la OPEP y su capacidad para equilibrar el mercado, el posicionamiento de los inversores es "extremadamente" bajista, lo que deja margen para nuevas subidas en caso de problemas en la oferta, tensiones geopolíticas o una contracción de la oferta por parte de Arabia Saudí. En este sentido, de cara a 2024 los analistas creen que el mercado ya tiene en cuenta la posibilidad de que Arabia Saudí mantenga la retirada de un billón de barriles durante el primer semestre e, incluso, dé un paso más allá, con el recorte de otro medio millón de barriles al día en la segunda mitad del próximo ejercicio. 

En este contexto, desde Lombard Odier se muestran optimistas de cara al arranque del nuevo ejercicio y calculan que la cotización del 'oro negro' debería oscilar entre los 80 y 90 dólares por barril en el primer semestre alentada por un repunte de la demanda procedente de China y las economías emergentes, pero sin descartar una caída en los primeros meses del año debido al exceso de oferta. "Esperamos que la OPEP+ siga gestionando proactivamente la producción para sostener los precios", apostillan desde esta casa de análisis. Tradicionalmente, la demanda de petróleo suele caer en enero, lo que les lleva a deducir que se debería registrar un pequeño superávit durante los próximos seis meses antes de que se restablezca un "equilibrio ajustado" a finales de año.

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