Nuevo Mercedes-Benz CLA: el hermano deportivo del Clase A Sedán sale en mayo

El fabricante alemán escogió la feria CES de Las Vegas para presentar su nuevo CLA la semana pasada. La siguiente generación, que se lanzará al mercado en mayo de 2019, supondrá la segunda carrocería de cuatro puertas derivada de la plataforma de la Clase A. Se transforma así en una alternativa más deportiva a la recién lanzada variante Sedán del compacto. Continuará fabricándose en las instalaciones húngarar de Kecskemét junto a la Clase A de cinco puertas, cuya producción comenzó allí en mayo de 2018.

Respecto al anterior CLA, el nuevo es casi cinco centímetros más largo, cinco centímetros más ancho y apenas dos milímetros más bajo. La distancia entre ejes crece tres centímetros, situándose en los mismos 2,73 metros que mide la batalla de la Clase A Sedán. La mayor variación se halla en la anchura de la boca del maletero, que gana 26 centímetros. El coeficiente aerodinámico se mantiene en 0,23.

Parecidos, pero no idénticos

Con la aparición de la Clase A Sedán, el cliente puede ahora optar por dos compactos de tres volúmenes en la gama de Mercedes-Benz. Por dimensiones, el CLA se situaría sobre este modelo, dado que mide casi doce centímetros más de longitud y tres de anchura. Pero la distinción fundamental radica en el estilo: el Clase A Sedán está más enfocado al espacio interior y el CLA al público que prefiere una opción más deportiva.

Se percibe en detalles como la caída más suave de la parte posterior del techo en el CLA, la altura siete milímetros inferior de este o la capacidad de carga del maletero. El volumen del de la Clase A Sedán alcanza los 510 litros, mientras que el del CLA tiene 460. A ello se añaden características distintivas entre ambos como los resaltes del capó, la forma de los faros y de los pilotos traseros -los del CLA heredan el diseño de los del CLS Coupé- o los parachoques. Donde no existen variaciones es en el aspecto del habitáculo.

Mercedes-Benz desmarca igualmente al CLA de la Clase A Sedán por el tipo de conducción. Según la marca alemana, el primero ofrece un control más dinámico gracias a una programación específica del control de estabilidad, a las vías más anchas, a un centro de gravedad más bajo y a la posiblidad de equipar el vehículo con una amortiguación de dureza variable, que incluye un ajuste más duro

Interacción avanzada para el asistente inteligente

La nueva Clase A estrenó el año pasado la tecnología Mercedes-Benz User Experience (MBUX). Este asistente permite utilizar las funciones del sistema multimedia con el tacto y con la voz. El nuevo CLA cuenta con la siguiente evolución del MBUX, entre cuyas novedades, además de responder a órdenes más complejas y comprender mejor el lenguaje coloquial, se encuentra un tercer modo de control: el gestual.

Uno de ellos, mostrar una V con los dedos índice y corazón frente a la consola central, se puede usar para activar una orden favorita, como encender la función de masaje del asiento. El MBUX almacena una para el conductor y otra para el acompañante. Otra mejora que ha aplicado Mercedes-Benz afecta a la recepción. Ahora le afectan en menor medida las interferencias producidas por las voces de los ocupantes traseros.

Con conducción semiautónoma

El CLA compartirá con la cuarta generación de la Clase A sus novedades en ayudas a la conducción. Mercedes-Benz destaca el control activo de distancia con el vehículo de delante combinado con la asistencia al mantenimiento de carril, obteniendo así un nuevo grado de manejo semiautomático. Con los datos del navegador, puede predecir cuándo hay que reducir la velocidad si se aproxima un cruce, una curva o una rotonda.

En el evento estadounidense, el fabricante de Stuttgart presentó el CLA en versión 250, con motor de gasolina de 225 CV y cambio automático de doble embrague. Cuando se introduzca en el mercado español, la oferta abarcará otros propulsores, tanto de ese combustible como diésel, así como versiones con cambio manual y tracción total 4MATIC.