Cremas y cosméticos Halal, aptos para el público musulmán y nueva tendencia

  • Halal, que significa permitido, se suele asociar a la industria alimentaria, aunque en la actualidad también se aplica a otros sectores.

    Cada vez son más las personas, independientemente de su condición religiosa, que preocupadas por la ideoneidad de los productos, optan por artículo con sello Halal.

    El estilo de vida Halal, una industria en pleno auge en España

Cremas y cosméticos Halal, aptos para el público musulmán y nueva tendencia
Cremas y cosméticos Halal, aptos para el público musulmán y nueva tendencia
S.C.

Productos eco, 'sin', detox...y ahora halal. Esta es la nueva tendencia en cosmética que gana adeptos. Halal se suele asociar a la industria alimentaria, aunque en la actualidad también se aplica a otros sectores como el turismo, las finanzas, los fármacos o la moda. Para muchos musulmanes, Halal -cuyo significado es permitido por la ley islámica por ser beneficioso- se ha convertido en un estilo de vida que afecta a la elección a la hora de consumir alimentos, pero también a los productos de belleza o cuidado personal. No solo los musulmanes optan por ellos. Cada vez son más las personas, independientemente de su condición religiosa, que preocupadas por la idoneidad de los productos, optan por este certificado en su día a día.

“Aproximadamente entre un 15 o 20 por ciento de los consumidores no elige productos con el sello halal por ser musulmanes, sino que identifican el concepto Halal con algo que es beneficioso. Saben que el producto ha tenido una vigilancia especial, ha tenido más ojos mirándolo y ha pasado por un control profesional de la producción, y eso, genera confianza”, explica Isabel Romero, directora general del Instituto Halal.

Según datos del informe State of the State of the Global Islamic Economy Report 2015/2016, elaborado por Thomson Reuters y el Dubai Islamic Economy Development Centre, el tamaño del mercado Halal alcanzó en 2014 los 1,8 billones de dólares, y para 2020 está previsto que esta cifra haya crecido un 6%. El motor del crecimiento es el sector agroalimentario, que representa 1,1 billones de dólares y del que se espera que alcance los 1,6 billones de dólares en los próximos cuatro años. Los sectores farmacéutico y de cosméticos (129.000 millones de dólares) también crecen con fuerza.

Te interesa leer: El estilo de vida Halal, una industria en pleno auge en España

Es por ello que muchas empresas españolas relacionadas con la cosmética apuestan por conseguir este sello. Una de las primeras en obtener este distintivo fue Laboratorios Válquer. “La certificación Halal no sólo vela por un consumo permitido de cosméticos para las personas de religión Islámica, sino que concede unas garantías de calidad (sin trazas animales, exhaustivo control de materias primas, calidad y rigor en los procesos de fabricación), que hacen que muchas personas, independientemente de su religión, quieran adquirir productos bajo esta denominación”, explica su director, José Luis Cerrillo. En su caso, han lanzado ya al mercado unos 40 productos con esta garantía, entre los que se pueden encontrar, champús, mascarillas, cosméticos faciales y corporales.

No son los únicos. NeoAlgae, una empresa de biotecnología que trabaja con microalgas ecólógicas, decidió solicitar el sello para todos sus productos de cosmética y alimentación. “Decidimos certificaros en Halal por varios motivos, uno, directamente por la exportación, dos, por la gran comunidad musulmana en España, y tres, para acudir a la Feria Mihas, en Malasia”, señalan. “De momento la certificación Halal nos ha abierto la puerta a dos países, Malasia e Irán, donde empezaremos pronto a distribuir”, indican.

Precisamente, desde el Instituto Halal han puesto en marcha el Cluster Halal Córdoba para atender a las necesidades de las empresas españolas que estén interesada en explorar este mercado que empezó a despegar a partir de la crisis, cuando las compañías españolas buscaron otros mercados y descubrieron el Halal. “En la actualidad en torno a 340 empresas españolas cuentan con este distintivo que te abre las puertas a un mercado que está creciendo mucho en Indonesia, Singapur, India, China, Oriente Medio y Golfo Pérsico”, subrayan desde el Instituto.

Te interesa leer: España da la espalda a las finanzas islámicas: apenas invierte según la sharia

Comparado con el resto de Europa, en nuestro país el mercado Halal está menos desarrollado. No obstante, según la directora del Instituto “el volumen de negocio alcanzó los 1.000 millones el año pasado, mientras que en Francia está en torno a los 11.000 y 15.000 millones de euros”. Por otro lado, según la plataforma Global Islamic Gatewar, los dos millones de musulmanes que viven en nuestro país compraron cosméticos por valor de más de 332 millones de euros en 2015; en 2020, su gasto será de 450 millones de dólares. Merece la pena pensar en Halal.

Mostrar comentarios