Islandia, Suecia y Noruega ya lo hacían. Francia se convierte en el cuarto país de Europa en sancionar a los clientes de prostitutas. El proyecto de ley, que ha viajado de manera incesante de la Asamblea Nacional y el Senado, y viceversa, fue finalmente aprobado.
La Asamblea finalizó la votación el miércoles y aprobó el proyecto a pesar de la oposición del Senado.
Las dos medidas que se imponen son la sanción al cliente y la derogación del delito de prostitución pasiva, que fue creado en 2003 por el Ministerio del Interior del entonces presidente de la República, Nicolas Sarkozy.Ayudas a las que quieran salir de la prostitución
El Gobierno francés concederá ayuda financiera y apoyo social a todas aquellas prostitutas que deseen cesar su actividad. Asimismo, se les otorgará un permiso temporal de residencia en el país.
La cuestión ha conllevado un intenso debate. Ha recibido numerosas críticas que califican la ley de inútil e, incluso, peligrosa. Señalan que la sanción a los clientes podría empujar a la clandestinidad, lo que supondría mayores riesgos para las prostitutas."Aumentará la represión policial y la inseguridad"
Poco antes de que la Asamblea Nacional aprobara la nueva ley, numerosas personas que trabajan en relación con la prostitución se concentraron para protestar contra el proyecto cerca del Palais-Bourbon. Consideran que la penalización del cliente aumentará la represión policial y volverá más precarias las condiciones de trabajo.
“Esta ley producirá [...] y promoverá nuestra inseguridad y las violaciones", publicó en Facebook Morgane Merteuil, la portavoz de la Unión del Trabajo Sexual.
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