El republicano Devin Nunes, presidente de la comisión de Inteligencia en la Cámara de Representantes del Congreso estadounidense, ha anunciado este jueves que renuncia a liderar la investigación sobre la supuesta injerencia rusa en las elecciones presidenciales del año pasado.
Nunes, un firme aliado de Trump, se encontraba en el centro de una importante controversia por varias manifestaciones que se tacharon de intentos de politizar las investigaciones para proteger a la Casa Blanca. Su tarea quedará en manos de otro legislador republicano, Mike Conaway.
Devin Nunes estaba siendo cuestionado después de asegurar el mes pasado que Trump y su equipo habían sido vigilados durante la fase de transición por los servicios de Inteligencia. La revelación unilateral de esta información y las reuniones mantenidas en la Casa Blanca pusieron en duda su labor.
Aunque considera que las acusaciones contra él son "totalmentes falsa" y tienen "motivos políticos", Nunes ha explicado este jueves que cree que lo mejor para la Comisión de Inteligencia de la Cámara Baja y para el Congreso en su conjunto es que abandone "temporalmente" el cargo, hasta que concluya la investigación abierta sobre los posibles lazos entre Trump y Moscú.
Asimismo, Nunes ha solicitado hablar ante la Comisión de Ética en cuanto sea posible para aclarar las dudas que se ciernen sobre él, según un comunicado difundido por su oficina.
El presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, ha reaccionado a esta dimisión temporal reiterando su "confianza" por el congresista y aplaudiendo su compromiso ético. En este sentido, ha dicho que apoya su decisión, con la que Nunes evita ser una "distracción" en las pesquisas pendientes.
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