Mogi das Cruzes, 3 jul.- La selección de Bélgica, rival el sábado de Argentina en los cuartos de final del Mundial, puso a los suplentes habituales a entrenar, mientras que la mayoría de los titulares tuvieron una sesión relajada que incluyó un paseo en bici.
Marc Wilmots, seleccionador de Bélgica, dispuso a los jugadores con menos minutos a trabajo con balón.
El único capítulo destacable fue el de Thibaut Courtois. El portero titular de la selección de Bélgica y del Atlético de Madrid abandonó la sesión de entrenamiento antes que el resto de los compañeros con hielo en la rodilla izquierda
El defensa Daniel Van Buyten y Romelu Lukaku, que disputa un lugar en ataque con el joven Divock Origi, se juntaron a los reservas.
Algunos de los futbolistas con más minutos se fueron incorporando paulatinamente a la práctica, entre ellos Axel Witsel, Marouane Fellaini o Vincet Kompany.
Ante la mirada atónita de muchos periodistas, llegaron al campo de entrenamiento de Mogi das Cruzes (a 90 kilómetros de Sao Paulo) en bicicleta, método de transporte habitual en Bélgica.
Wilmots tiene clara la formación de la defensa (Toby Alderweireld, Daniel Van Buyten, Vincent Kompany, Jan Vertonghen), pero alberga alguna duda en el centro del campo.
Con Axel Witsel, Marouane Fellaini, Kevin De Bruyne y Eden Hazard fijos, podría optar por el medio Steven Defour en vez de Dries Mertens si opta por una táctica 'anti-Messi'.
Romelu Lukaku o Divock Origi, dos atacantes fuertes, técnicos y rápidos, es la otra duda de Wilmots. Lukaku fue decisivo ante Estados Unidos por su gol y el jovencísimo Origi lo fue en la primera fase ante Rusia, con otro tanto.
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