Bombas recubiertas de una fina capa de apetitoso chocolate negro. Chocolatinas nazis explosivas. Una estrategia perfecta para conquistar Gran Bretaña.
Varios documentos secretos de la Segunda Guerra Mundial intercambiados entre funcionarios del servicio secreto británico revelan que el plan de los alemanes incluía un destino dulcemente mortal para Winston Churchill,revela el Daily Mail en un reportaje.
Los agentes secretos alemanes en Inglaterra serían los encargados de colocar las atractivas y letales chocolatinas entre los aperitivos del Gabinete de Guerra aliado.
Pero los espías británicos pronto descubrieron el pastel. En una carta que recoge el diario británico, el jefe de Inteligencia -Lord Victor Rothschild- dio la voz de alarma inmediatamente desde su Búnker secreto de Londres.
Para ello, no se le ocurrió una mejor idea que la publicidad: mandó a un ilustrador dibujar el artefacto a tamaño póster para advertir al público del peligro y para que estuvieran atentos por si las veían:
"Querido Fish
Me pregunto si usted podría hacerme un dibujo de una chocolatina explosiva.
Hemos recibido información de que el enemigo está utilizando estas chocolatinas de acero con una cubierta muy fina de chocolate real. En el interior hay un explosivo y algún tipo de mecanismo de retardo...
Cuando se rompe un trozo de chocolate en un extremo de la manera normal se activa el mecanismo […]
Le adjunto un dibujo muy mal hecho por alguien que ha visto uno de ellos."
La carta secreta fue encontrada en 2009 por la esposa de Mr. Fish mientras ordenaba sus cosas después de la muerte del artista, según el diario británico.
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