Detienen en La Paz al abogado de exfiscal boliviano fugado a Brasil

La Paz, 14 mar.- La Policía boliviana detuvo al abogado Moisés Ponce de León, quien ejercía como letrado del exfiscal del "caso terrorismo" Marcelo Soza, huido esta semana a Brasil, donde ha pedido refugio, informaron hoy fuentes oficiales.

Ponce de León fue detenido en su domicilio en La Paz y será trasladado a Santa Cruz por orden de la jueza anticorrupción de ese departamento Rosse Mary Barrientos, informó a medios locales el viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez.

El abogado está acusado de extorsión dentro del "caso terrorismo", en el que se juzga a los responsables de un supuesto complot secesionista organizado en el 2009 en la ciudad de Santa Cruz (este) para atentar contra el presidente Evo Morales.

La Embajada de Brasil en Bolivia confirmó esta semana que Soza, que estuvo a cargo del "caso terrorismo", se encuentra en Brasil desde el pasado lunes, a la espera de que la Comisión Nacional de Refugiados (Conare) evalúe su caso.

Soza dirigió el "caso terrorismo" hasta marzo del año pasado, cuando renunció al cargo.

Ese caso se destapó el 16 de abril de 2009 cuando un comando policial realizó un operativo en un hotel de Santa Cruz que se saldó con tres extranjeros muertos y dos detenidos, acusados de ser una célula terrorista que quería atentar contra Morales con fines secesionistas.

En esa operación murieron en croata-húngaro-boliviano Eduardo Rozsa, el rumano Magyarosi Arpak y el irlandés Dwayer Michael Martin, mientras que fueron detenidos el húngaro Elöd Tóásó y el croata-boliviano Mario Tadic, actualmente en prisión.

Soza dimitió en marzo del 2103, después de que la oposición hiciera pública una grabación en la que supuestamente él hacía revelaciones sobre corrupción en el sistema judicial boliviano.

También aparecieron unas fotografías suyas con abogados a los que el Gobierno acusa de extorsión,

La Fiscalía General de Bolivia ya ha solicitado a la Interpol la búsqueda y extradición de Soza, en tanto en presidente Morales ha tildado públicamente al exfiscal de "corrupto" y "delincuente confeso".

Este asunto ha abierto una nueva grieta en las relaciones entre Brasil y Bolivia, ya que la fuga de Soza tiene lugar seis meses después de que el senador boliviano Roger Pinto escapara de Bolivia y llegara al país vecino con la ayuda de diplomáticos brasileños tras permanecer más de un año asilado en la Embajada brasileña en La Paz.