La moda de los suburbios llega a las pasarelas de París

El mes de junio en Normandía significa campos de flores de lino azul, que también se usan para hacer ropa. Aquí, donde se hace la mejor de ropa del mundo, el diseñador de moda Nuchi Xiong muestra cinco conjuntos hechos en la fábrica, un mes después de ganar el premio de moda de diseño original CiteStyle.

No es fácil entrar en la industria de la moda, con muchos aspirantes y pocos puestos de trabajo, especialmente para aquellos que no tienen contactos. En este sentido CiteStyle se creó el año pasado para identificar a los diseñadores innovadores de los barrios periféricos deprimidos de París, que de otro modo seguirían siendo un potencial creativo "inexplorado". Es una alianza entre la prestigiosa escuela de moda de París, ESMOD y los patrocinadores corporativos Inditex Francia, JCDecaux y el Instituto Randstad.

Nuchi Xiong dice que ganar el premio le abrió la puerta para conseguir su sueño. Esta mujer de 25 años y con dos hijos no tiene ningún tipo de formación oficial. Ella se inspira en la moda que ve en la televisión y en la influencia de la ropa que hace su madre para las ocasiones festivas. Los padres de Xiong se trasladaron a Francia procedentes de Laos en la década de 1970 y forman parte de la comunidad étnica Hmong. Las mujeres de etnia hmong son conocidas por su habilidad con la costura y por elaborar coloridos diseños de patrones sofisticados y accesorios tales como cintas o brazaletes.

"Creo que la moda en (los barrios periféricos) es más original. Somos más osados y añadimos nuestro toque personal a nuestros diseños", explica Xiong, "Tengo tendencia a pedir prestadas las cosas de nuestra cultura [hmong] como bolsas, turbantes o trozos de trajes, usando una mezcla de tejidos como el algodón o tul transparente".

Los organizadores del show de moda descubrieron a Xiong, que vive en Evreux, a una hora de París en tren, cuando la prensa habló sobre su victoria. Aunque Xiong nunca había trabajado en la moda antes, sus toques personales eran evidentes en los diseños que presentó en su primer desfile. En sólo tres semanas, Xiong creó un total de cinco conjuntos que son una mezcla de vanguardia y de folclore, con cintas, cinturones, sombreros, correas decorativas y flores de lino que recuerdan a las flores de lino azul de Normandía.

Xiong confiesa que había esperado hasta que sus hijos estuvieran en la escuela a tiempo completo para dedicarse a su carrera. Ahora, además de recibir un cheque por valor de 3.000 euros como parte del premio de CiteStyle, Xiong verá como se convierten en realidad los diseños urbanos que presentó al jurado en Bershka, que forma parte del grupo gigante español Inditex, que también es propietaria de Zara, y quién fabricará y venderá sus prendas de vestir en Francia el próximo otoño. El importe de las ventas será donado a FACE (Fundación Agir Contra la Exclusión), una organización que tiene como objetivo prevenir la exclusión social a través de iniciativas de empleo. Bershka está dirigido al mercado juvenil y tiene unas ventas de más de 1,1 millones de euros. También cuenta con 600 tiendas en 42 países, sin incluir EEUU.

Xiong viajará a España a finales de este mes para finalizar su colección con los diseñadores de Bershka, y después recibirá 15 días de formación en ESMOD.

La ganadora de CiteStyle el año pasado, Sabra Kerrouche, es del suburbio parisino de Aulnay-sous-Bois, que captó la atención mundial durante los disturbios civiles en Francia en 2005. Kerrouche, cuyos padres son de Argelia, se ha inspirado en su madre, que era costurera. Desde entonces, ha creado su propio sello, Aul People (un juego de palabras con "Aulnay" y la palabra Inglesa "all"), y llevó a cabo dos desfiles de moda en Aulnay-sous-Bois utilizando como modelos a estudiantes locales que habían abandonado el instituto.

Xiong pasó parte de su juventud en Aulnay-sous-Bois y su madre sigue comprando allí las telas. Conoció a Kerrouche durante los premios CiteStyle y dice que estaba impresionada por el éxito de Kerrouche y por su generosidad. A ella le gustaría seguir los pasos de Kerrouche mediante el establecimiento de su propio negocio, pero añade que está abierta a cualquier cosa.

Mi estrategia es comenzar un pequeño negocio a través de internet, abrir tiendas en Francia y luego en el extranjero, para convertirme en un diseñador como Valentino o (Kart) Lagerfeld. No se puede tener todo de inmediato pero es bueno soñar", destaca.

Sin embargo, sigue siendo muy complicado entrar en el mundo de la moda parisina y sin los contactos adecuados es un mundo que sigue siendo cerrado, apunta Sabra Kerrouche. "Pero por mí vale, quiero hacerlo por mi cuenta".

Xiong dice que su madre la había disuadido de convertirse en una diseñadora, advirtiéndole que sería un camino difícil pero que "ella fue la primera en saltar de alegría" cuando Xiong se hizo con el premio. Tanto Xiong como Kerrouche han dicho que sus premios les hicieron aumentar la confianza en ellas mismas.

Sin embargo, no ha sido fácil, admite Kerrouche. "No esperé a que las cosas me cayeran en mis manos por sí solas y todo lo que he hecho desde que gané el premio lo he hecho por mi cuenta".

Kerrouche sueña con abrir una boutique en París, pero dice que simplemente no tiene los medios. Randstad planea darle entre 2.000 y 3.000 euros para impulsar sus planes de negocios, que incluyen un sitio web para vender sus diseños.