Las mezquitas se niegan a enterrar a Salman Abedi, el terrorista de Manchester

  • La Policía no descarta aún que formara parte de una "red más amplia" aunque estuvo solo los días previos al atentado.

    La familia tampoco puede tratar con el cuerpo de Salman porque se encuentra en Libia.  De momento se queda en un depósito a las afueras de la ciudad. 

La Policía difunde imágenes del terrorista Salman Abedi antes del atentado
La Policía difunde imágenes del terrorista Salman Abedi antes del atentado
EFE
L.I

Las autoridades de la ciudad están haciendo "todo lo que está en su mano" para impedir que sea incinerado, enterrado, o que su cuerpo descanse en cualquier rincón de Manchester.

Consejos, directores de funerarias y mezquitas en Manchester se niegan a tratar con el cuerpo de Salman Abedi, el terrorista suicida que dejó la semana pasada 22 muertos, y, de momento, su cadáver se encuentra en un depósito a las afueras de la ciudad, según asegura The Sun. 

Este caso recuerda al de un asesino que murió a principios de este mes, Ian Brady,  y que todo el mundo en Reino Unido se negó a tratar con su cuerpo después de que se supiera que quería que sus cenizas fueran esparcidas en Glasgow.La bomba la pudo fabricar él solo

Salman Abedi compró el mismo buena parte de los componentes de la bomba que empleó y estuvo solo los cuatro días previos al atentado, si bien la Policía aún no descarta que forme parte de una "red más amplia", ha explicado este miércoles el jefe de la unidad antiterrorista de la Policía en el noroeste del país, Russ Jackson.

"Nuestras averiguaciones muestran que el propio Abedi hizo la mayoría de las compras de los componentes centrales y parece que muchos de sus movimientos y acciones los realizó solo durante los cuatro días desde su llegada al país y la comisión de este horrible ataque", ha indicado en un comunicado.

No obstante, ha precisado que sigue siendo "vital" el determinar si formaba parte de una "red más amplia", "algo que no descartamos aún". Según Russell, la investigación se ha centrado en buena medida en conocer "los últimos movimientos de Abedi", incluidas las llamadas de teléfono que hizo

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