Rosa María Payá: "Si se letiende una mano a Cuba se le debe reclamar que las manos de los cubanos no sigan atadas"

    • La disidente cubana e hija del opositor Oswaldo Payá considera el deshielo entre EEUU y Cuba una buena oportunidad para que la comunidad internacional apoye cambios reales en la isla.
    • Sobre la muerte de su padre asegura que seguirá luchando por una investigación independiente y afirma que está decepcionada con la actitud del Gobierno español.
Eurodiputados piden una investigación internacional por la muerte de Oswaldo Payá
Eurodiputados piden una investigación internacional por la muerte de Oswaldo Payá

A pesar de su juventud, 26 años, de su boca nace un discurso cargado de compromiso, lucha, justicia y dolor. Rosa María Payá Acevedo nació en un contexto y en un país, Cuba, donde la revolución, en un sentido oficialista u opositor, era la condición sine qua non bien para no ser perseguido o por el contrario, para forjar un cambio algún día en la isla, costase lo que costase.

Este último tipo de revolución es el que llevó a cabo su padre, Oswaldo Payá, que el mismo día del nacimiento de su hija, en 1988, fundó el Movimiento Cristiano Liberación para reclamar un cambio pacífico y democrático en la isla. 26 años después, Cuba ha anunciado un restablecimiento de las relaciones diplomáticas con EEUU, un primer paso que no despeja la duda de si la democracia se instalará finalmente en la isla. "Como bien decía mi padre si se le va a tender una mano a Cuba se le debe reclamar que las manos de los cubanos no sigan atadas", asegura Rosa María Payá desde Miami en una conversación con LAINFORMACION.

Se muestra cauta y prevenida cuando se le pregunta por las expectativas depositadas en esta apertura de diálogo entre Cuba y EEUU. A pesar de atemperar su discurso, reconoce que las conversaciones son una gran oportunidad para que la comunidad internacional presione al régimen para lograr el sueño de su padre: la celebración de un plebiscito que permita a los cubanos decidir su futuro.

La muerte de su padre en julio de 2012 en un accidente de coche en extrañas circunstancias es otro de los episodios amargos de su vida de los que hemos hablado y que está presente en cada una de sus reivindicaciones. Exige una investigación independiente sobre el caso y manda un mensaje al Gobierno español. "Estoy decepcionada por como ha tratado este asunto".

1. ¿Qué opina del deshielo diplomático entre Estados Unidos y Cuba?

Estoy a favor del diálogo, pero como bien decía mi padre si se le va a tender una mano a Cuba se le debe reclamar que las manos de los cubanos no sigan atadas. Es un paso positivo en la medida en que sea solidario con los ciudadanos cubanos.

Hasta ahora nosotros no hemos obtenido ninguna respuesta a las preguntas y propuestas que hemos hecho, y realmente creo que el Gobierno cubano tampoco le ha dado muchas respuestas a los negociadores de la delegación norteamericana.

Quedan algunos pasos como un diálogo sobre los derechos humanos, la realización de elecciones libres, plurales y democráticas dentro de la isla, cosa que no ocurre desde hace más de 62 años, y una investigación independiente sobre el atentado contra mi padre, Oswaldo Payá -líder del Movimiento Cristiano Liberación e histórico líder opositor del Gobierno de los Castro- y Harold Cepero -opositor pacífico y compañero de partido de Payá-, que es un ejemplo de la represión sistemática de las fuerzas y seguridad del Estado del Gobierno cubano.

Si no se abordan estos asuntos, será un diálogo entre dos élites que se ajustará a los mejores intereses de las dos partes, pero no tendría nada que ver con una solidaridad afectiva con la ciudadanía cubana.

2. El Proyecto Varela, que desarrolló su padre y que fue avalado por más de 25.000 firmas de cubanos, ¿cree que debería ser la hoja de ruta que defienda EEUU como exigencia principal al Gobierno cubano?

Las demandas del Proyecto Varela son muy elementales. No son demandas partidistas, ideológicas ni tan siquiera son demandas de la oposición, son demandas de la ciudadanía cubana. Está en coherencia con las leyes internacionales y con los principios de la democracia. Es lo mínimo que debería estar en esa mesa de negociación, pero no como una petición al Gobierno cubano para que haga los cambios, sino que se pregunte a los ciudadanos sobre los cambios en Cuba.

El Gobierno cubano lleva años haciendo cambios en las leyes para vender reformas a la comunidad internacional que en realidad no garantizan los derechos de los cubanos, por eso el cambio no puede recalar en el Gobierno. Los cubanos tienen que participar y lo mínimo que las democracias del mundo pueden reclamar al Gobierno cubano cuando se sienten a negociar con ellos es precisamente que los ciudadanos puedan decidir, que haya una participación efectiva de la ciudadanía en un país donde nadie que tenga menos de 80 años ha participado en elecciones libres.

3. ¿Cómo han sido las conversaciones que ha mantenido con los negociadores estadounidenses?

He tenido conversaciones en la Casa Blanca con Ricardo Zúñiga -principal asesor para América Latina y miembro de las negociaciones secretas entre EEUU y Cuba que llevaron al restablecimiento de las relaciones diplomáticas- y encuentros informales con la secretaria de Estado para Latinoamérica, Roberta Jacobson.

No me han prometido nada, pero lo que sí puedo decir es que ellos tienen muy claro cuáles son las demandas que ayudarían a los ciudadanos cubanos y saben que los puntos del Proyecto Varela no se cumplen en Cuba.

Si los ciudadanos no pueden participar ni decidir, ningún cambio será real para la democracia.

4. El pasado 3 de febrero compareciste en la primera audiencia que se celebró en el Congreso estadounidense sobre la mejora de las relaciones con Cuba. En ese panel aseguraste que espera que las voces de los cubanos estén en las negociaciones. Con su presencia en este importante encuentro, ¿se podría decir que la intención del Gobierno estadounidense es implicar a la disidencia cubana en el exterior en el proceso negociador?

La presencia de la disidencia sirve para que se conozca qué es lo que los cubanos están viviendo y demandando. La voluntad real de implicación y de inclusión del Gobierno norteamericano en este acercamiento al Gobierno cubano y a todos los cubanos se verá con las demandas existentes en la mesa y con los resultados de esas conversaciones.

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5. ¿Cuál sería la principal conclusión que pudiste extraer de esa primera audiencia en Washington?

Hablamos de dos puntos de vista diferentes. EEUU hará aquello que sea mejor para sus intereses y los disidentes estábamos allí abogando por los derechos de los cubanos.

Mi opinión es que los derechos de los cubanos no convienen sólo a EEUU sino también a toda la región. La democracia en Cuba y las garantías del estado de derecho convienen a la estabilidad, a las garantías comerciales y a la seguridad de los futuros inversionistas en el continente. Yo espero que los gobiernos democráticos del mundo puedan ver la conveniencia de la democracia y de un proceso de reforma pacífica, porque este esfuerzo de preservación del status quo en Cuba parte de los mismos que han estado reprimiendo al pueblo durante más de 55 años y esto no tiene un final feliz posible.

Los cubanos están viendo que cambia la imagen pero siguen sin derechos. Quieren ver cambios reales y quieren participar de esos cambios de forma pacífica. De lo contrario, el modelo ruso no va a funcionar en Cuba. El diálogo es una oportunidad para que la comunidad internacional apoye las demandas elementales de los cubanos como lo hicieron en su día durante la dictadura de Pinochet apoyando el plebiscito. Los cubanos no merecemos menos.

6. Senadores demócratas y republicanos, como Bob Menéndez o Marco Rubio, sostienen que la negociación secreta entre EEUU y Cuba ha comprometido principios básicos a cambio de nada. ¿Está de acuerdo con esta afirmación?

Los EEUU tratarán de sacar sus mejores condiciones. De momento no he visto ningún efecto positivo para los cubanos. Me parece bien la atención por lo que está ocurriendo en Cuba y las miradas que está recibiendo de la comunidad internacional.

Una conclusión positiva del acercamiento de un gobierno democrático a un gobierno dictatorial sólo sería posible si se es coherente con los valores democráticos y si en esa mesa de negociación están incluidas las demandas de los ciudadanos cubanos. Si los los gobiernos democráticos del mundo se prestan al juego de exclusión del gobierno cubano entonces estamos hablando de una cuestión de élites que no tiene nada que ver con la voluntad y los beneficios de los cubanos.

7. El senador republicano Marco Rubio también ha llamado la atención del peligro de que el dinero de los estadounidenses en los viajes a Cuba vaya a parar a manos del mecanismo de represión. ¿Comparte este temor?

Cuba es un país totalitario donde losjerarcas millonarios y represores tienen en sus manos todos los medios de produccióny todos los servicios. Hay algunos cubanos, que representan un porcentaje mínimo de la población, que tienen la posibilidad de tener pequeños negocios que podrían verse beneficiados con esto. De todas maneras, el flujo último de capital va a manos del gobierno cubano porque posee todos los recursos de la nación. Pero esto ha sido así durante 55 años. El tiempo que yo trabajé en Cuba tuve un salario de menos de 20 dólares al mes y todo el salario real por el valor de mi trabajo se lo estaba quedando el gobierno cubano.

Las ganancias seguirán yendo al Gobierno hasta que los cubanos no puedan decidir su futuro y puedan cambiar las leyes para que se garanticen sus derechos, porqueson esas leyes las que impiden a los cubanos competir en igualdad de condicionestanto fuera como dentro de su mismo país. Por eso sería una incoherencia sentarse a una mesa de negociación y no pedir que los cubanos tengan sus manos desatadas para poder escoger a sus representantes.

8. Está previsto que miembros de la sociedad civil cubana participen en un encuentro con líderes latinoamericanos en la próxima Cumbre de las Américas de Panamá en abril. ¿en qué se basará ese encuentro?

De momento desconocemos con qué líderes nos vamos a reunir. Esperamos que podamos hacerlos con los líderes de toda la región para así expresar nuestras demandas, que son tan elementales y transversales a cualquier democracia en el mundo. Es importante recibir el apoyo que es coherente con el estado de derecho y que tiene que ver con larecuperación de los derechos humanos más elementales de los cubanos, específicamente el derecho a decidir su futuro y concretamente en el plebiscito que estamos reclamando hace muchos años.

9. Estuvistepresente en el discurso de Obamasobre el Estado de la Unión. ¿qué sensaciones y opiniones le mereció el discurso?

Siempre es interesante ver como las democracias funcionan y como los oficiales electos deben rendir cuentas por lo que han hecho. Mi presencia en el discursorepresentaba simbólicamente una ciudadanía que hasta ahora había quedado excluida.

Espero que todos estos gestos, que las recientes conversaciones hagan su mella y podamos asistir a un proceso que sea coherente con los valores democráticos y que sea provechoso para todos los cubanos y por tanto para el resto de la región.

10. Uno de los movimientos realizados por el Gobierno de Obama tras ese anuncio el pasado 17 de diciembre fue la petición a Kerry de revisar la inclusión de Cuba en la lista de países a los que Estados Unidos considera patrocinadores del terrorismo. ¿Qué opina?

Tengo entendido que la lista de países terroristas está confeccionada por un equipo técnico en el cual los opiniones o las voluntades no tienen nada que ver. Este equipo analiza los hechos y en función de los hechos elabora una lista donde se encuentran los países patrocinadores del terrorismo, porque tienen terroristas en territorio nacional o han negociado con organizaciones terroristas. Estas evidencias son públicas y están presentadas a toda la comunidad internacional.

Ahí están los hechos, ahí está elbarco norcoreano cargado con armas cubanas, ahí están losterroristas buscados por EEUU viviendo en las calles de La Habana. En definitiva, ahí están los hechos para ser juzgados.

11. ¿Sería una decepción que EEUU hiciera este tipo de concesiones sin que Cuba a cambio realice gestos verdaderamente aperturistas?

Mis esperanzas no tienen nada que ver con lo que vaya a hacer el Gobierno de EEUU. Yo ni me decepciono ni me ilusiono con las posiciones que toma la administración norteamericana. Hay una coyuntura que tiene que ver con un cambio de política de EEUU ynuestro deber está en decirles lo que es coherente con su posición de país democráticoy lo que los cubanos necesitan y el apoyo que ellos pueden dar a la democracia en Cuba.

Pero la decisión de hacerlo o no la toman ellos para bien o para mal de los ciudadanos cubanos.


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12. En estos 55 años de poder castrista ¿cree que hay diferencias entre la gestión de Fidel y la de Raúl?

Mi experiencia personal ha sido que la gestión deRaúlha sido mucho más brutal que durante la de Fidel, porque fue su seguridad del estado quien gestó elatentado en el quemataron a mi padre y a mi mejor amigo.

13. En varias ocasiones, Estados Unidos ha reclamado una investigación más a fondo de la muerte de su padre. ¿Le han confirmado si será parte del nuevo diálogo entre Washington y La Habana?

Me han dicho que el tema de la investigación está en su agenda, pero no tienen ninguna respuesta del gobierno de Cubaen este sentido.

14. Ha realizado peticiones a la ONU, al Parlamento Europeo, al noruego, al sueco, al suizo… para que se reclame una investigación sobre la muerte de tu padre. ¿Qué respuestas ha obtenido hasta ahora? ¿Tiene pensado emprender acciones legales a través de la justicia española como ha manifestado en otras ocasiones?

Lajusticia españolaestá lamentablementemuy vinculada con el Ejecutivo español.

Sin embargo, el Parlamento Europeo aprobó hace un año una enmienda dándole el mandato a laAlta Comisionada de Derechos Humanos de la UEpara promover una investigación independiente sobre el atentado que acabó con la vida de mi padre y de Harold Cepero.

También tenemos un proceso abierto en laRelatoría de Crímenes Extrajudiciales de Naciones Unidasy estamos esperando respuesta en laComisión Americana de Derechos Humanos.

15. ¿Cuál fue el último contacto con las autoridades españolas sobre este asunto?

La última apelación la hicimos hace un año y fue rechazada.

16. ¿Qué le diría al ministro Margallo?

El Gobierno español sabe queno fue un accidente, probablemente lo supo antes que nosotros, porquemiembros del PP recibieron mensajes de Carromero pidiendo auxilio, diciendo que estaban rodeados de militares, que un coche los había envestido y que los había sacado de la carretera.

Nosotrosestamos decepcionados con la actitud que el Gobierno españolha tenido con respecto a la investigación de mi padre, que también es ciudadano español.

17. Ha asegurado que semanas después de la muerte de tu padre, tú y tu familia recibisteis amenazas de muerte procedentes del régimen, ¿sigue recibiendo esas amenazas?

Desde que salí de Cuba la última vez (hace un año) no recibo unallamada de teléfono diciéndome que me van a matar. Pero sí he recibido amenazas desde los blogs oficialistas en los que se publican la cantidad de años que mi madre y yo vamos a pasar en prisión por difamación del Gobierno cubano.

Mi familia y yo salimos de la isla por el peligro que corrían nuestras vidas, pero tengo claro queregresaré a Cubaaunque sigan los Castro al frente.

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