El día no ha terminado para los manifestantes en contra del presidente Hosni Mubarak y los partidarios del presidente, que han mantenido una batalla campal durante todo el día. Las protestas se han desplazado a las calles cercanas a la plaza Tahrir.
Como en el frente de una guerra abierta, ambos mandos llevan todo el día moviendo sus líneas. Cuando unos avanzan los otros retroceden, pero poco a poco el enfrentamiento ha evolucionado. La última novedad son las barricadas metálicas que sirven como escudo para los manifestantes que protegen el acceso a la plaza.
Los bandos han comenzado a lanzarse cócteles molotov después de dos horas de relativa tranquilidad. En el lapso se han dado a conocer cifras sobre el número de fallecidos y heridos, pero es posible que a lo largo de la noche la cifra tenga que ser modificada.
Recuento de heridos
Al menos tres personas han muerto y más de 600 han resultado heridas en los enfrentamientos ocurridos este miércoles en el centro de El Cairo. Resguardados tras camionetas o simples cartones, partidarios y detractores del presidente egipcio, Hosni Mubarak, se han enfrentado a pedradas y golpes en las calles aledañas a la plaza Tahrir.
Los datos han sido difundidos por el ministerio de Sanidad que afirmó que tres personas perdieron este miércoles la vida y que se había contabilizado 611 heridos. Uno de los manifestantes opositores, de nombre Azza, indicó a la BBC que había muchos heridos "cubiertos de sangre" y que algunas personas lanzaban "piedras muy, muy grandes". Algunos manifestantes incluso se subieron a azoteas de edificios para atacar desde arriba a las personas que se congregaban en las calles.
El Ejército egipcio se ha mantenido en una posición mediadora, y tras intentar dispersar a los manifestantes con botes de humo han intentado separar ambos frentes. Sin embargo, el ambiente violento entre un bando y otro no cesa en la capital.
Aunque no se ha dado una confirmación por parte del Gobierno de Mubarak, los manifestantes opuestos al presidente han denunciado la presencia de policías vestidos de paisano en el otro bando.
Piedras, látigos y palos
Los defensores de Mubarak atacaron a los manifestantes opositores con látigos, piedras y palos, mientras que los detractores del presidente respondieron igualmente con piedras y otros objetos, en unos combates que han convertido El Cairo en una zona de guerra en la que apenas se dispone de informaciones oficiales.
Los reporteros de Al Jazeera, informaron también de la presencia de armas blancas en los enfrentamientos, aunque la información oficial sobre las revueltas es escasa.
Hasta la plaza Tahrir, epicentro de las protestas contra el régimen, se desplazaron también personas montadas a caballo o incluso en camello para golpear a los allí presentes, en una amalgama en la que se hacía imposible distinguir de qué parte estaban quienes atacaban o respondían a estos ataques.
El Ejército, al margen
Entretanto, el Ejército egipcio ha optado por no intervenir y, aunque se llegó a decir que los militares habían disparado al aire para evitar enfrentamientos, la propia institución negó posteriormente este detalle.
Su implicación se habría limitado a utilizar mangueras para apagar los fuegos provocados por los cócteles molotov, parte de los cuales cayeron en el Museo Egipcio.
De hecho, el Ejército pidió por la mañana a los miles de manifestantes que siguen reclamando la salida del presidente que "vuelvan a sus hogares". "Vosotros comenzasteis esto saliendo a la calle a expresar vuestras demandas y vosotros sois los únicos capaces de restaurar la normalidad", ha dicho un portavoz militar.
Puedes seguir en directo lo que está pasando en el centro de la capital aquí.
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