El Parlamento de Ucrania ha aprobado este martes por iniciativa del presidentePetró Poroshenko una ley que define el marco jurídico para la aplicación de la ley marcial. La decisión del dirigente ha contado con el apoyo de 254 parlamentarios, de los 450 que conforman la Rada Suprema del país europeo, que desde hace una año vive una guerra civil en el este de su territorio después de los enfrentamientos armados que se produjeron tras el derrocamiento del presidente electoVíktor Yanukóvich por las protestas de las fuerzas opositoras europeístas.
"Debemos proteger la paz y si las tropas ucranianas sufren un ataque, haremos todo lo posible para protegerlas; inmediatamente proclamaremos la ley marcial", manifestó a la televisión ucraniana Poroshenko, recalcando que dicha medida no viola el Tratado de Minsk firmado el pasado 5 de septiembre y en el que se estipulaba el alto al fuego.Semanas después, su iniciativa ha contado con el visto bueno de la Rada y la controvertida legislación podrá introducirse en el país en caso de de que Ucrania pueda ser objetivo de una amaneza de ataque o a su integridad e independencia territorial.
La ley marcial es un tratado de excepción aplicable en situaciones límite, en las cuales los derechos constitucionales quedan en segundo plano. Las fuerzas militares y policiales, por tanto, podran frenar la libertad de movimiento de sus ciudadanos, confiscar bienes y propiedades privadas, así como a intervenir en el trabajo de los medios de comunicación y prohibir cualquier acontecimiento multitudinario.
La autoridades ucranianas añaden además la peculiaridad de trasladar y repatriar a ciudadanos extranjeros que consideren que pueden enturbiar la paz del país. Un punto que choca con otra de las polémicas iniciativas del Gobierno de Poroshenko, el cual ha presentado a la vez un primer documento, aprobado por el Parlamento, para permitir que ciudadanos foráneos puedan viajar al este de Ucrania en escuadrones afines a Kiev.
"Cuando los extranjeros y las personas sin ciudadanía obtengan la oportunidad legal de servir en las Fuerzas Armadas, nuestro país conseguirá varias unidades aptas para el combate, experimentadas y bien motivadas", recoge la iniciativa. Hasta la fecha, y pese a la críticas, Kiev se ampara en un vacío legal que permite a ciudadanos no ucranianos servir en sus filas militares.
La nueva ley marcial no solo da autoridad para impartir justicia a los mandos militares y a sus administraciones, sino también a las empresas, autoridades, instituciones y organizaciones locales, que podrán recibir "los poderes necesarios para atajar amenazas, y rechazar agresiones armadas". La decisión de crear dichos órganos y a sus responsanbles compete en exclusiva al presidentePoroshenko, asesorado por los mandos militares para tal fin.
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